Los detenidos por el crimen de Tomás Tello, el chico de 18 años asesinado en Santa Teresita, se negaron a declarar este miércoles en la ciudad de Mar de Ajó. Allí, a las puertas de la sede judicial, el fiscal a cargo de la causa, Pablo Gamaleri, ratificó la imputación a los ocho detenidos mayores de edad como coautores o partícipes necesarios de homicidio agravado por premeditación y alevosía, mientras que señaló a uno de ellos, Damián Kopelian, como el principal sospechoso de haber clavado la puñalada letal. Por la tarde, sin embargo, declaró otro testigo que aseguró haber visto el momento del hecho y negó que Kopelian haya sido el autor material del crimen. La mamá de la víctima, en tanto, dijo estar "conforme" con la actuación de la fiscalía hasta el momento.

"Hubo una agresión como consecuencia de una disputa previa en una reunión celebrada cerca de la fecha de navidad; eso motivó que, el día del hecho, estas personas fueran al encuentro de la víctima con un primer enfrentamiento en la playa y luego otro enfrentamiento final". En rueda de prensa frente a la fiscalía, así explicó Gamaleri la hipótesis que manejan los investigadores, y que llevó al fiscal a determinar los dos agravantes del homicidio por el "concurso premeditado de dos o más personas y por alevosía". 

La "disputa previa" de la que habló el titular de la Unidad Funcional de Instrucción N° 11, ocurrió el 23 de diciembre por la noche, en una fiesta por navidad. La hipótesis de la fiscalía es que, durante la madrugada de año nuevo, el grupo integrado por Kopelian  fue a buscar a Tello para cobrarse revancha de lo ocurrido en la pelea original. El episodio de año nuevo, a su vez, se divide en dos momentos: el primer ataque, ocurrido en la playa cerca del muelle de Santa Teresita, y el segundo, a las puertas de una casa de la calle 44, a media cuadra de la costanera, donde el chico fue "acorralado" y finalmente apuñalado. Según los investigadores, entre un momento y el otro hubo una persecución. 

"Esa hipótesis se encuentra firme; una investigación de este tipo puede ir variando, pueden surgir nuevos elementos, pero al día de la fecha todo indica que los sucesos fueron como los estamos describiendo", agregó Gamaleri. Durante la rueda de prensa, además, el fiscal mencionó a Kopelian, de 21 años, como la persona sindicada como quien propinó la puñalada en el corazón que mató a Tello.

Además de Kopelian hay otros siete detenidos mayores de edad: Avedi Kopelian, de 53 años y padre de Damián, Aram Kopelian, de 27 años y tío de Damián, Gonzalo Brandan, de 22 años, Carlos Amestoy, de 29, Roberto Ochoa, de 27, Dario Espinosa, de 33, y Darío Cejas, el último de los detenidos. Todos se negaron a declarar este miércoles. El fiscal precisó que cuatro de ellos están acusados como presuntos coautores del homicidio y los otros como partícipes necesarios, aunque no detalló las identidades de cada uno. También hay detenidos otros dos chicos de 16 y 17 años, cuya situación procesal deberá ser definida por la justicia de menores de Dolores. 

Por la tarde del miércoles, en tanto, declaró ante el fiscal un joven que se presentó por su cuenta como testigo del homicidio. El joven, llamado Nahuel, contradijo la versión de los investigadores en cuanto al autor material de la puñalada letal sobre Tello. Según aseguró, Kopelian sí aportó el arma blanca en cuestión a una persona vestida de amarillo, que luego de matar al chico se la devolvió a Kopelian para que él huyera con ella. Hasta el momento, los investigadores no pudieron dar con el arma

Nahuel llegó a la fiscalía en compañía de Magalí Cejas, la hermana del último detenido en la causa. La mujer aseguró que su hermano es "inocente" y sostuvo que su familia incluso conocía a Tello, a quien llamó "Tomy": "Mi nena es amiga de Tomy y mi hermano lo conoce, ¿en qué cabeza cabe que le va a hacer daño?", dijo Cejas ante la prensa. "Mi hermano no estuvo ahí. En el video se ve que sale con una botella para que se vayan otros que vinieron a agredir, pero nunca estuvo cerca de Tomás", agregó. 

Tras la declaración de Nahuel, Samanta, la mamá de Tomás, se reunió durante cerca de dos horas con el fiscal para prestar declaración y conocer pormenores de la causa. La mujer brindó algunos detalles sobre el conflicto "original" del 23 de diciembre y también aportó nombres de otros posibles testigos, amigos de su hijo, que podrían ser citados a declarar en los próximos días. Al salir de la fiscalía, Samanta dijo estar "tratando de seguir adelante" tras el crimen y aseguró que está "conforme" porque "el fiscal está trabajando perfectamente". 

La mujer estuvo acompañada de su abogado, Miguel Ángel Pierri, quien también se manifestó conforme con el trabajo realizado hasta ahora. "Estamos satisfechos con el curso y el pulso de investigación", dijo y coincidió con el fiscal en que en la causa "hay un autor, coautores y partícipes necesarios, puede haber cambios pero lo que ocurrió es indubitable: a Tomás lo mataron con un arma blanca". El abogado también sostuvo que "la premeditación la tenemos prácticamente probada" porque "hubo un hecho previo que ocurrió el 23 de diciembre". El fiscal ya ordenó la realización de peritajes de todos los celulares de los detenidos, que fueron trasladados a la Unidad Penal N°6 de Dolores.