El gobernador de Santa Fe, Maximiliano Pullaro, volvió a recibir este lunes una amenaza contra la integridad de su familia y, para protegerlos, decidió que se trasladen fuera de la ciudad de Rosario.

Las intimidaciones contra Pullaro comenzaron en diciembre, horas después de que el Gobernador dispudiera la restitución de jefes narcos y sicarios a los pabellones de alto perfil en la Unidad Penitenciaria 11 de Piñero, y la prohibición del ingreso de familiares con alimentos.

"Recibí una amenaza a mi familia. Vamos a seguir por este camino de pelear contra la delincuencia, vamos a seguir manteniendo a los presos de alto perfil en pabellones especiales, que es lo que más les molesta. Vamos a mejorar los niveles de violencia y seguridad", explicó el gobernador radical.

Aunque no dio detalles sobre el mensaje amenazante, sí confirmó que estaba dirigido a su familia y por este motivo días atrás anunció que todos se mudaron a otra ciudad santafesina: "Es contra mi familia y hay algo sugestivo sobre la donación de órganos", reveló.

Pullaro no aceptó custodia policial

"No nos vamos a amedrentar", ratificó Pullaro, a la vez que explicó por qué no aceptó custodia para su familia, tras pasar días encerrados en su departamento.

"Primero estuvieron encerrados en mi departamento, sin salir siquiera a la calle. Estaba preocupado y no iba a hacer esa chantada de ponerle 10 policías para que los acompañen a todos lados, cuando no te terminan pudiendo cuidar y vos le sacás un montón de recursos a la gente que no la están cuidando. No iba a hacer eso porque no corresponde", detalló.

Esta nueva amenaza apareció en la mañana del lunes en el interior de la oficina de Migraciones, la cual fue reinaugurada tras permanecer cerrada por remodelaciones.

"Lamentablemente, ya casi acostumbrado desde que comenzó nuestra gestión. Pero ratificamos el rumbo de seguir por el mismo camino, de seguir peleando contra la delincuencia aquí en la ciudad de Rosario, en la provincia de Santa Fe", expresó el mandatario provincial.

Otras dos amenazas en diciembre 

El pasado 12 de diciembre, a poco de asumir, Pullaro fue amenazado mediante otra nota que fue dejada tras una balacera ejecutada contra un cajero automático de una sucursal del banco Macro en Rosario.

Al otro día, el 13 de diciembre, en otro ataque a tiros contra a fachada del hospital público de Emergencias -Heca-, presuntos sicarios dejaron otra nota estaba dirigida al gobernador y firmada por internos del pabellón 9 de la cárcel de Piñero.

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