Tras la polémica por sus ataques a Lali Espósito —a quien, en modo Troll, llamó "Lali Depósito"— el presidente Javier Milei retomó este viernes el tema en sus redes sociales. Afirmó que "el problema no es una actriz" sino "una arquitectura cultural diseñada para sostener un modelo que beneficia a los políticos". Y afirmó que su gobierno viene "a terminar con eso".

A través de un mensaje publicado en X, antes Twitter, el mandatario afirmó que "la raíz del problema argentino no es político y/o económico, es moral". Y consideró que consecuencia de ello es "el cinismo político y la decadencia económica". 

Bajo el título "Desarmando el Gramsci Kultural", y con pretendidas ínfulas académicas, el mandatario ¿denunció? que "este sistema está podrido y por donde se lo toca sale pus".

Citando al filsófo italiano —o algo así— el ultraderechista aseguró: "Gramsci señalaba que para implantar el socialismo era necesario introducirlo desde la educación, la cultura y los medios de comunicación". Y agregó que "Argentina es un gran ejemplo de ello".

En este sentido, y retomando su habitual lenguaje —menos académico y más agresivo—señaló que a "los progres bienpensantes" se les "detona la cabeza" cuando se "expone la hipocresía" y salen a "defender a capa y espada sus privilegios", refiriendose así a la gran cantidad de artistas y referentes culturales que salieron a apoyar a Lali tras el asimétrico ataque presidencial.

"No sólo quedan expuestos aquellos que reciben los privilegios de los políticos en términos de remuneraciones no validables a mercado, sino que también quedan expuestos aquellos políticos, gobernadores e intendentes que se valen de los recursos aportados por los pagadores de impuestos para hacer propaganda política", continuó.

A modo de conclusión, el mandatario consideró que "lo más maravilloso de la batalla cultural llevada a la política versada sobre el principio de revelación es que cuando uno señala las vacas sagradas del edificio de Gramsci, automáticamente genera una línea de separación entre los que viven de los privilegios del Estado y las personas de bien".

"Acá el problema no es una actriz. Es una arquitectura cultural diseñada para sostener el modelo que beneficia a los políticos. Bueno, nosotros venimos a terminar con eso", explicó

Cómo empezaron los ataques de Milei a Lali Espósito

Lali quedó del lado del bando de "enemigos" del Presidente, término en el que  entiende a quienes lo critican o simplemente no apoyan sus políticas, cuando después del triunfo del líder de la Libertad Avanza en las PASO, la cantante expresó su preocupación en sus redes sociales. "Qué peligroso. Qué triste", publicó entonces. 

Desde entonces, la intérprete de éxitos como "Disciplina" y "N5" se convirtió en un blanco del odio de los seguidores libertarios y los "trolls" de redes sociales, quienes la llamaban "Lali Depósito" y acusaban de "vivir del Estado" por haber actuado en festivales públicos.

Días atrás, durante su presentación en Cosquín rock, Lali respondió a las críticas y ataques virtuales."Que si fumo/ que si vivo/ que si digo/ que si bebo/ que si vivo del Estado”, cantó Lali en la presentación de su tema "Quiénes son?", al que le agregó la última frase para responder a los cuestionamientos que comenzaron desde que se expresó contraria a las ideas del Gobierno.

En otro tramo de la noche, le habló a sus seguidores y les dijo: "Esta fiesta que somos los argentinos, esta unión que genera el arte, la música, la cultura, nadie nos la va a sacar jamás. Depende de nosotros y de ustedes, de acompañar y defender. Esta canción es para los mentirosos, los giles, las malas personas, los antipatria y todos".


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