La Comunidad del Caribe (Caricom) convocó a una reunión de urgencia para este lunes, en Jamaica para tratar la "grave" situación que atraviesa Haití, tras el nuevo foco de violencia que llevó al decreto de estado de emergencia. Al encuentro fueron invitados representantes de Estados Unidos, Francia, Canadá y la ONU.

"Hemos tomado la decisión como comunidad de escribir a los jefes de Estado y jefes de gobierno, de los países clave con los que Haití está comprometido como socios, invitándoles a reunirse con nuestros jefes en CARICOM en Kingston, Jamaica", indicó el presidente de Guyana, Irfaan Alí.

La reunión busca "tratar urgentemente" con Francia, Canadá, Estados Unidos y Naciones Unidas la situación de Haití y todos los demás "asuntos críticos para la estabilización de la seguridad y la provisión de ayuda humanitaria urgente", añadió.

Qué pasa en Haití

Haití, el país más pobre de la región, vive bajo una ola de violencia cada vez más extendida por las pandillas, que amenazan con una guerra civil si no renuncia el primer ministro, Ariel Henry.

El político, en el poder desde el asesinato del presidente Jovenel Moïse en julio de 2021, debía haber dejado el cargo a principios de febrero, pero se resiste a convocar elecciones.

Desbordadas por los disturbios, las autoridades extendieron el estado de emergencia en todo el departamento del oeste de Haití, que incluye Puerto Príncipe, y prolongaron un toque de queda nocturno.

La situación del país fue abordada recientemente por la Comunidad de Estados Latinoamericanos (CELAC), y el jueves Estados Unidos pidió una "respuesta global" a la violencia pandillera e instó al primer ministro a una transición "urgente".

Henry se encuentra en Puerto Rico desde el martes, después de no poder aterrizar en el aeropuerto de la capital haitiana por motivos de seguridad, y de que la vecina República Dominicana le negara el permiso de aterrizaje.

La Caricom dijo estar teniendo "profundas conversaciones con las distintas partes interesadas de Haití" y con Henry. "Aunque estamos haciendo progresos considerables, las partes interesadas aún no están donde tienen que estar. Según nuestros informes, la situación sobre el terreno sigue siendo grave y nos preocupa seriamente", aseguró Alí.