La virulencia de los cruces entre jugadores, dirigentes y árbitros a partir de los últimos arbitrajes registrados en la Copa de la Liga Profesional obligó a que en un día y horario especiales, el Comité Ejecutivo de la AFA y de la Liga Profesional se reuniesen este lunes para tomar cartas en el asunto y bajar los decibeles de las discusiones.

El cónclave tuvo lugar en el Complejo Lionel Messi de Ezeiza con el propósito de calmar las aguas tras el entredicho que sostuvieron a través de las redes sociales protagonistas de muy alto perfil como el director técnico de Independiente, Carlos Tevez, y el tesorero de la AFA, Pablo Toviggino.

Con la presencia de Claudio Tapia y de toda la plana mayor del fútbol argentino, se les pidió a los presidentes y/o vicepresidentes de los veintiocho clubes de Primera División que los reclamos los hagan en privado y no con declaraciones públicas en los medios de comunicación o en las conferencias de prensa post partido. Tal como ocurrió en los casos de Tevez con Toviggino y el árbitro Pablo Dóvalo y los técnicos de Newell's Old Boys, Mauricio Larriera, de Defensa y Justicia, Julio Vaccari, y de Estudiantes de La Plata, Eduardo Domínguez.

El presidente Tapia, además, reiteró la intención dialoguista entre las partes, utilizando la vía interna como principal y único canal de comunicación y también se dejó en claro que en momentos en los que a nivel político los conflictos mediáticos están a la orden del día, el fútbol debe buscar “otro perfil” y diferenciarse de esa forma de proceder. Tapia asimismo instó a los presidentes de los clubes para que disciplinen a jugadores, cuerpo técnico y empleados sobre cómo canalizar los reclamos y evitar generar mayor crispación entre los hinchas y socios.

El pedido fue confirmado por Luciano Nakis, dirigente de Independiente que estuvo presente en la reunión. “En mi carácter de prosecretario, participé de la reunión de Comité Ejecutivo de AFA. Dirimimos diversas cuestiones sobre la coyuntura y coincidimos en bajar el nivel de hostilidad reinante. Este es el ámbito natural donde los protagonistas del fútbol argentino deben expresarse”, escribió Nakis en su cuenta de X. Ninguno del resto de los asistentes hizo declaraciones a su salida del predio de Ezeiza. 

Si bien el cónclave no estuvo ligado únicamente a ese pase de facturas, Tapia convocó a los dirigentes para hablar también de los cuartos de final de la Copa Liga Profesional 2024 que volverán a jugarse en canchas neutrales (faltan cuatro fechas para conocer a los ocho clasificados) y del Fair Play Financiero. Y se decidió una modificación clave respecto a las sanciones a los directores técnicos: de ahora en más, si un DT tiene una pena efectiva por parte del Tribunal de Disciplina de más de dos partidos, deberá ser de cumplimiento efectivo y dejará de ser canjeable por entradas. Anteriormente, el límite estaba marcado en cuatro jornadas.

Una vez terminada la reunión, los dirigentes compartieron un asado en el quincho, donde Tapia se mostró sonriente, en medio de los representantes de River y Boca. A su izquierda estaba Ignacio Villarroel, vicepresidente segundo de River y a su derecha, Ricardo Rosica, secretario general boquense. Y los escoltaban de un lado Toviggino y del otro, el presidente de Racing, Víctor Blanco, dando una imagen de unidad luego de una semana futbolística al rojo vivo.