Érika de Souza Vieira Nunes se presentó en el banco con su tío Paulo Roberto Braga en silla de ruedas para terminar la solicitud de un préstamo por 17.000 reales (alrededor de 3 millones y medio de pesos) en un banco de Río de Janeiro. Solo necesitaba la firma del hombre. Que el hombre estuviera muerto fue, para Érika, apenas un detalle.

El hecho ocurrió en Bangu, Zona Oeste de Río de Janeiro. Toda la secuencia quedó filmada por los empleados del lugar en un clip que rápidamente se hizo viral en las redes sociales.

En el video compartido por O Globo, que además está siguiendo el caso, se puede ver cómo la mujer intenta hacerle firmar un papel a un señor en silla de ruedas. El señor, por obvias razones, no responde, pero ella insiste en sostenerle la cabeza y moverle las manos mientras dice "El es así".

A pesar de todo, la mujer logró avanzar con el trámite. Pero los trabajadores del banco advirtieron que algo no andaba bien. Después de llamar a la policía, constataron que el hombre estaba muerto.

La mujer fue detenida pero sin embargo, ella aseguró que el hombre estaba con vida cuando lo llevó al banco.

Por eso, se realizó una autopsia cuyos resultados son desconcertantes. Porque según los estudios forenses, el hombre falleció "por broncoaspiración de contenido estomacal o falencia cardíaca", entre las 11 y las 15 del martes. Es decir, cuando fue llevado a la institución bancaria

La conclusión del perito es que “no existen elementos fehacientes que permitan afirmar, desde el punto de vista técnico y científico, que el señor Paulo Roberto Braga falleciera dentro de la sucursal bancaria".

El informe también afirma que Braga “ya estaba enfermo y necesitaba cuidados especiales”. Ante la policía, Érika se presentó como la cuidadora del hombre, además de resaltar que era parienta suya. 

Aún se busca constatar si efectivamente, la mujer es prima o sobrina del señor en sillas de ruedas.

 "Los hechos no sucedieron como les contaron. Paulo llegó vivo a la sucursal del banco. Hay testigos que serán escuchados en el momento oportuno. Empezó a sentirse mal y luego pasó por todos estos trámites. Todo esto será esclarecido Creemos en la inocencia de la señora Érika”, dijo la abogada Ana Carla de Souza Correa, quien defiende a la sospechosa.