Licenciado en administración, especializado en el sector público, en la gestión y el control, Miguel Nina, actual decano de la Facultad de Ciencias Económicas, Jurídicas y Sociales de la Universidad Nacional de Salta (UNSa) es uno de los tres candidatos a rector en las elecciones que se disputarán este 11 de abril en la universidad pública salteña. Los otros dos son el actual rector, Daniel Hoyos, y el actual decano de la Facultad de Ciencias Naturales, Julio Nasser.
"Tenemos un plan de acción para la universidad". Un plan que toca aspectos vinculados con el gobierno de la universidad y con la gestión y además "permite generar algunas reformas en algunas áreas claves de la universidad" que son requeridos por los cambios de los conocimientos y la tecnología, aseguró Nina respecto de la propuesta de la lista Unidad y Autonomía Universitaria para la conducción de la UNSa.
Uno de los pilares de esa plan es, sostuvo, la defensa "de la universidad pública, no arancelada y de calidad".
El plan contiene aspectos internos y externos de la gestión universitaria, contempla varios ejes: lo académico, la extensión universitaria, lo institucional, la investigación, el alumnado, la administración del personal no docente y la gestión presupuestaria. "Es un plan integral" que "permite llevar adelante una transformación importante", afirmó.
El candidato destacó dos aspectos cuya atención es más urgente en el Rectorado: lo vinculado a lo académico, los problemas en la planta docente y el problema financiero. "Creo que la universidad está en una situación sumamente compleja en términos financieros porque los recursos que llegan del Ministerio de Capital Humano (de la Nación) no alcanzan a cubrir los montos salariales y esto significa un inconveniente para la universidad, nosotros habíamos propuesto años anteriores un plan que servía como base para darle previsibilidad a la ejecución presupuestaria, como es un plan de emergencia financiera", señaló.
Nina consideró que la universidad "está en crisis respecto de lo financiero". Destacó que el año pasado estuvieron casi todo el año trabajando sin presupuesto, y en 2023 también. "Hemos tenido un déficit de casi 1.600, 1.700 millones de pesos al año que estaba centrado fundamentalmente en los gastos salariales", dado que "Los fondos que vienen para el pago de sueldos no alcanzan a financiar la totalidad del gasto salarial", insistió. Detalló que en enero de este año hubo un déficit financiero dentro del rubro personal de 220 millones y un déficit para febrero de casi 140 millones.
"Esta situación creo que amerita avanzar en la generación de un incremento de los aportes del tesoro" y analizar también fuentes alternativas de financiamiento, dijo, ya como propuesta. En el mismo sentido consideró que habría que fijar un régimen de prioridades, "eliminar gastos innecesarios" y "producir una diversificación de las fuentes de financiamiento". Otra alternativa es "tener un vínculo muy importante con el sector de empresas y el sector público de manera de generar recursos alternativos" que podrían servir para atender otros requerimientos.
Un plan centrado en el alumnado
"Uno de los aspectos más importantes que tiene nuestro plan de acción es que está centrado fundamentalmente en el alumno" porque "consideramos que el almuno es la razón de ser de la universidad", afirmó Nina sobre su propuesta de gestión de la UNSa.
Agregó que el plan "apunta también a provocar un reforma en el sistema de bienestar de la universidad", por ejemplo, con la ampliación del cupo del comedor, la elaboración de comidas más saludables y que la universidad pueda ofrecer un menú que los estudiantes que no tienen beca del comedor puedan adquirir a precios razonables.
Por otro lado, adelantó que prevén hacer un análisis profundo de las becas de estudio, para verificar que estén bien direccionadas. Lo mismo con el merendero, en este caso para mejorarlo. También propone "trabajar con estudiantes de pueblos originarios". Y ocuparse de una cuestión que viene provocando un conflicto tras otro: el boleto estudiantil, "es un tema que ha sido álgido en los dos últimos años" porque se introdujo en los convenios que firmaron las autoridades que el almunado debe tener dos materias aprobadas, "excluyendo a muchos chicos que tienen actividad económica regular pero no tienen esa condición", sostuvo.
Asimismo, dijo que prevé poner en práctica un programa de salud mental que ya se aplica en Ciencias Económicas con buenos resultados.
En lo académico, por un lado, consideró que se deben corregir los indicadores, que "no son buenos para la universidad", y por otro lado, "avanzar en un proceso de modernización y de actualización de los planes de estudios". Y "avanzar en el análisis de nuevas carreras", como pueden ser carreras cortas como tecnicaturas, carreras a distancia o titulaciones intermedias. Como ejemplo, contó que en Económicas introdujeron en las carreras de grado dos titulaciones intermedias, las tecnicaturas universitarias en contabilidad y en administración. Son un incentivo para seguir los estudios y también para el estudiante que abandonó su carrera en tercer o cuarto año los pueda recuperar y obtener un título, además de que las tecnicaturas implican una salida laboral, afirmó.
El equipo de Miguel Nina resalta el planeamiento, la rendición de cuentas, las fortalezas en investigación, los proyectos de extensión, el doctorado en Ciencias Económicas, y la jerarquización de la planta docente entre sus logros institucionales de los últimos años al frente de la Facultad de Ciencias Económicas, Jurídicas y Sociales.
"Tengo la experiencia recorriendo a lo largo de 40 años en los que ocupé distintos roles, como alumno, docente, investigador, personal administrativo y dos veces decano en esta universidad, para impulsar la transformación que la UNSa requiere, con carreras cortas, vinculadas a las demandas del mercado laboral, el fortalecimiento y la articulación de la investigación académica, la capacitación permanente para nuestra personal no docente, entre otras iniciativas", ratificó en distintas declaraciones el candidato a rector que ayer participó de un debate organizado por los Centros de Estudiantes de la UNSa y que se desarrolló con la ausencia del actual rector y candidato a renovar mandato.
Miguel Nina, que también resaltó la experiencia de su compañera de fórmula, María Rita Martearena, “una hija de esta universidad”, actualmente vicedecana, hizo hincapié en la rendición de cuentas. Es necesaria, dijo, porque "dota de transparencia a cualquier gestión, más aún cuando se trata de fondos públicos, demanda que hoy en día la sociedad con absoluta justificación lleva adelante".
Y también expuso propuestas para los otros sectores que componen la comunidad universitaria. Para los graduados, planificar espacios en los que puedan seguir formándose; para los docentes, seguir gestionando el fortalecimiento de la jerarquización como se hizo en Económicas. Para los investigadores, "trasladar todo lo que la universidad produce a la comunidad, potenciando y generando ese desarrollo a través de financiamiento no sólo público sino también privado", y para los no docentes, "apuntar a la capacitación permanente y fortalecer su participación en el terreno de la extensión y la investigación".