La escritora Claudia Piñeiro inaugurará la próxima edición de la Feria Internacional del Libro de Buenos Aires, que abrirá al público del 26 de abril al 14 de mayo en La Rural. De la 44° edición, que tendrá a Montevideo como ciudad invitada, participarán los estadounidenses Paul Auster y Richard Ford, la francesa Yasmina Reza y el mexicano Juan Villoro, quien estará a cargo de la apertura del “Diálogo de Escritores Latinoamericanos” junto a Eduardo Sacheri. En el año del Mundial, los dos escritores, hinchas del Necaxa y de Independiente respectivamente, hablarán de fútbol y literatura. A diez años de la publicación de La casa de los conejos, Laura Alcoba iniciará el “Diálogo de Escritores Argentinos” en una feria que dedicará la tradicional Maratón de Lectura a Manuel Puig y que programará debates y actividades especiales por el Centenario de la Reforma Universitaria y los cincuenta años del Mayo del 68. “Además de sus méritos autorales, Claudia ha aparecido siempre dispuesta a dar la cara, a participar del debate público, a tener una opinión propia”, explicó Oche Califa, director de la Feria, durante una serie de anuncios que realizó la Fundación El Libro (FEL) en la librería Dain Usina Cultural.
“Voy a la Feria del Libro desde principios de los 80. Si no recuerdo mal en esa época se hacía en el Centro de Exposiciones que estaba junto a la Facultad de Derecho. Fui casi todos los años, primero como lectora, luego como lectora y escritora. Fui muchas veces a escuchar el discurso inaugural. Y a infinidad de conferencias. La Feria del libro me permitió entrevistar públicamente a escritores que admiro: David Grossman, Alessandro Baricco, Pierre Lemaitre. Casi todas mis novelas las presenté en la Feria del libro. Ahora me toca dar el discurso inaugural, algo que es sin dudas una alegría, un honor y una gran responsabilidad”, dijo Piñeiro a PáginaI12. “Nos importa generar acontecimientos culturales trascendentes y despertar la curiosidad entre públicos distintos con una oferta cultural muy plural”, aseguró Califa y anticipó que la 44° edición estará identificada por una fuerte presencia femenina, entre las que mencionó a la joven poeta española Elvira Sastre –que tiene más de 84 mil seguidores en Twitter y lleva publicados cuatro libros– y la poeta peruana Giovanna Pollarolo. Los jóvenes, que cada vez adquieren mayor protagonismo en el mundo del libro, tendrán su propia fiesta dentro de la “gran fiesta del libro” con el Encuentro Internacional de Booktubers, la Convención Blogger y el Encuentro de Bookstagrammers. Por segundo año consecutivo se entregará el Premio Literario Fundación El Libro al mejor libro de cuentos inéditos, que este año lo ganó el tucumano Máximo Chehin con Salir a la nieve. El jurado para el 2018 está integrado por el puertorriqueño Eduardo Lalo, Ana María Shua, Mempo Giardinelli y Jorge Lafforgue. Una gran satisfacción que le deparó a la FEL este premio nuevo es que la escritora que salió segunda, Yanina Rosenberg con los cuentos Los afueras, será publicada por la editorial española Páginas de Espuma.
El proyecto de ley “Regulación a los proveedores de servicios de enlace y búsqueda de contenidos alojados en Internet”, más conocido como “Ley Pinedo-Fellner” –por los apellidos de sus autores, los senadores Federico Pinedo del PRO y Liliana Fellner del Frente para la Victoria– es un proyecto “letal” para el conjunto del sector editorial –como lo definió Aurelio Narvaja secretario de la FEL y editor de Colihue– porque establece que las grandes plataformas no son responsables del contenido que pueden subir y piratear los usuarios. “En la fotografía del conjunto de las instituciones que nos reunimos en el café Tortoni estaba por un lado Horacio González y del otro Luis Brandoni, porque esto nos afecta gravemente a todos”, advirtió Narvaja. “Mercado Libre tiene 300 mil PDF truchos y la Cámara Argentina del Libro sólo pudo dar de baja 2000”, agregó Gabriel Waldhuter, protesorero de la FEL y dueño de la distribuidora y librería Waldhuter, para ejemplificar la complejidad del asunto. Aunque fueron convocados por los diputados, como reveló el editor de Colihue, “la negociación es no tocar la ley aprobada en el Senado y después hacer una ley que compense. Pero la ley así como está no tiene remedio”, aclaró Narvaja y subrayó que “la democratización de los contenidos no puede hacerse a través de la violación de los derechos de autor”. ¿Es una chicana llamar al proyecto Pinedo-Fellner como “Ley Google”? Un miembro de la FEL, al final de la presentación, le contó a esta cronista que en 2016, antes de que se sancionara en la cámara de Senadores, representantes de la CAL se reunieron con Pinedo en las oficinas que Google tiene en Puerto Madero, sobre la calle Alicia Moreau de Justo al 300. “Hasta que no encontremos la vuelta legal, las editoriales vamos a detener la digitalización de libros para no entregarnos al ‘gran mantero global’, confirmó Narvaja en alusión irónica a Google.
