La periodista y conductora Cynthia García se emocionó al recordar la movilización a Plaza de Mayo en apoyo a la expresidenta Cristina Kirchner y, aunque no desestimó el reclamo, destacó el "aglutinamiento" del peronismo y la vuelta del clamor popular a las calles.
El editorial de Cynthia García
Lo que tenemos para contar es lo que hemos caminado, los abrazos que nos hemos dado, la gente con la que nos hemos encontrado. Yo, en un momento de recorrer para cubrir, para hacer la crónica, para tener la imagen, tengo imágenes de Cristina Presa al lado de la estación de la línea A ahí en Avenida de Mayo, y saber que de ahí para adelante ya no se podía mover más. Mucha gente muy emocionada. Se cantó muchas veces el himno, se cantó muchas veces la Marcha Peronista, era un dato.
Hay un dato también de aglutinamiento del peronismo, del peronismo como movimiento, del peronismo como memoria histórica. Porque el peronismo es una marca de identidad, lo hemos dicho muchas veces.
Se puede definir de muchas maneras al peronismo. A mí, la que más me identifica o la que más me parece que llena todo lo que significa el peronismo, que ya no recuerdo quién dijo -creo que fue un antiperonista el que dio esta definición-, a mí me la comentó, en una entrevista que le hicimos, Juan Manuel Abal Medina padre, que murió hace unos días. Con esta idea del peronismo como un signo, como una marca: el peronismo como una marca de identidad, cultural, política, histórica, de vivencia.
En estos días, que fueron innumerables las cantidades de encuentros, rondas, plenarios, conversatorios, mateadas que tuvimos, porque también hay un reverdecer de todo eso. Si sos más de izquierda, el modo es más asambleario. Si sos más "peruca", el modo es más plenario. Pero en las distintas modalidades y en muchos lugares, escuchaba este relato que también confluía ayer en la movilización: "yo vengo de una familia peronista" o "yo vengo de una familia antiperonista".
Cómo el peronismo, como Perón, empoderó -palabra que nos la trae Cristina cuando habla de empoderamiento- a un sujeto político que eran los migrantes, los cabecitas negras, el aluvión zoológico del 17 de octubre. Cómo empoderó y convirtió a esas masas migrantes sin trabajo, esos peones rurales, cómo los emergió sujeto político. Y eso te deja una marca. Es una marca indeleble.
Por eso, cuando alguien se presenta en estos días, sobre todo dice “yo vengo de…”, ¿Cuál es la memoria histórica de la casa de cada cual? Y a partir de ahí me resuenan, por ejemplo, y a partir de ahí confluye todo esto. Digo, me resuenan las palabras de, por ejemplo, Maitena, que en el "culturazo" que se realizó ya hace un par de días -todo parece un siglo desde la detención, desde la confirmación de la condena por parte de estos tres tipos que están en la Corte-. Y perdón, Katja Aleman también habló, pero Maitena decía: "yo vengo de una familia gorila. Yo me hice peronista hace muy poco. Me hice peronista con el kirchnerismo, con el movimiento de mujeres, con las luchas feministas". Eso es una marca de identidad, lo que te identifica, lo que te deja una huella. Esa huella puede ser muchas veces estar hecha de vivencias dolorosas. Todo eso confluía allí, en la Plaza de Mayo.
No era cualquier cosa lo que ocurría, no era cualquier reclamo -sin quitar la profundidad de cualquier reclamo-. Quiero decir, no era el reclamo de los trabajadores de tal gremio o de tal sector, justamente reclamando derechos equis. No, esto es otra cosa, tiene otra profundidad, tiene una identidad, está marcado. Cada uno de los que estábamos ayer en la plaza teníamos latente esa marca de identidad.
Por eso decía que se escuchó muchísimo -yo nunca antes escuché tanto en una marcha, en una movilización- cantar la Marcha Peronista. Y el momento en que Cristina irrumpe con su mensaje grabado -después también tuvo una comunicación en vivo- fue un momento de mucha ovación y de mucha emoción. Seguramente alguna gente estaba triste, pero el espíritu de la movilización no era de tristeza, sino de alegría. Era la alegría, como dice Dolina, la alegría de estar juntos. Si preguntan por qué estamos aquí, y por qué estamos riendo, y por qué estamos celebrando, y por qué estamos bailando, es porque estamos juntos, juntas y juntes. E intergeneracionalmente, además.
Hay una generación de jóvenes que también está despertando de esa apatía, corriéndose -porque no hay manera de no ser nativo digital para esas generaciones- y consumiendo críticamente estas redes sociales. Así que me parece que aquí hay un empezar. Se cantó también, hace mucho que yo no escuchaba, el "Vamos a volver". Me parece que fue una rotunda definición de Cristina, una parte sostenida e importante de su mensaje. "Vamos a volver". E inmediatamente la multitud cantó, inacabablemente, "Vamos a volver".