Salta capital será escenario de la segunda edición de la Noche de las Galerías, un evento que propone recorrer la ciudad a través del arte. Este viernes 18 y sábado 19 de julio, trece espacios culturales, entre galerías independientes y espacios de exhibición, abrirán sus puertas de forma gratuita con una programación especial que incluye muestras, charlas, performances, recorridos guiados y encuentros con artistas.
La propuesta, que se desarrollará de 18 a 22, busca consolidar un circuito artístico local y posicionar al galerismo como una herramienta central para la visibilidad, circulación y comercialización del arte contemporáneo producido en Salta. “Ya no es solo una noche, estamos intentando establecer el Circuito G -de galerías- como una red articulada de espacios que exponen, acompañan y venden obra de artistas salteños”, contó Soledad Dahbar, artista visual y directora de La Arte, una de las impulsoras de la iniciativa.
Para consultar la programación completa y ver el mapa interactivo del circuito se puede hacer click aquí.
En esta segunda edición, la ciudad se convierte en galería abierta. Entre los espacios participantes se encuentran Rayuela, Remota, Casa Galería, Deriva, BAC, Mamoré, Legui, Ronda, Reyes Art Gallery, Nativa, Rosario Cornejo Arte Contemporáneo, Palomino Salomón Art y La Arte. La organización destacó que cada espacio cuenta con su propio perfil y poética, y ofrecerán más de una docena de muestras, desde arte geométrico y abstracto hasta instalaciones performáticas, fotografías, cerámica indígena, grabados y escultura contemporánea. También habrá charlas, residencias abiertas, visitas guiadas, muralismo en vivo y vernissages.
“El circuito muestra una diversidad enorme en la producción artística salteña", dijo Dahbar. Señaló que hay espacios más contemporáneos y otros más ligados a lenguajes modernos. "Pero todos trabajan con artistas vivos, acompañan sus proyectos, producen, escriben, montan y venden. Y eso no es poco en este contexto”, agregó en diálogo con Salta/12.
Pedagogía, circulación y mercado
Uno de los ejes centrales de esta edición es la visibilización del rol de las galerías como espacios de exhibición, como actores pedagógicos, productivos y comerciales dentro del ecosistema artístico. “El perfil de una galería se distingue del de un museo justamente por eso: por la posibilidad de adquirir obras", explicó la artista visual. Dijo que también se diferencia por el "trabajo silencioso que hacemos junto al artista" puesto que "producir una muestra implica acompañar conceptualmente, montar, curar, escribir, mediar con el público y poner esa obra en circulación".
En La Arte, por ejemplo, se exhibe “Manifiesto”, una instalación del joven artista Franco Menacho, curada por Soledad Sánchez Goldar. “Es una muestra bien jugada", describió Dahbar, dado que se trata de "una instalación donde los objetos se deshacen de alguna forma, por decirlo de modo poético". En ese sentido, subrayó que es ahí donde entra el rol de la galería, ya que se busca "explicar eso al público, cómo hacés que alguien comprenda que eso también se puede adquirir, que eso también tiene un valor”, contó.
También remarcó que si bien el arte puede ser una inversión, lo es en otra escala. Cuando se compra la obra de un artista emergente, "estás acompañando su carrera, su tiempo, su proyección. Eso también se cotiza". En ese sentido, las galerías funcionan como plataformas de proyección para les artistas, especialmente en un mercado tan chico y fragmentado como el de Salta, afirmó.
Lejos de la idea romántica del arte como vocación desinteresada, Dahbar puso el acento en la economía del arte, marcada por la precarización y la ausencia de políticas públicas sostenidas. “Aunque parezca un negocio, una galería no lo es", dijo entre lamentos e ironías. "Laburamos muchísimo más de lo que ganamos. Y ese es nuestro gran aporte a la cultura”, resaltó, por lo que "si no hay financiamiento para crecer y circular, todo se vuelve cuesta arriba”.
El panorama se agrava cuando se compara con el funcionamiento de otros circuitos del país, por ejemplo, en arteBA -la feria más importante de Argentina- ya que para participar y ser seleccionado se debe pagar al menos 4.000 dólares por un stand. “Entonces, ¿cuánto tiene que valer una obra para cubrir eso? ¿Cuánto tiene que vender el artista? ¿Quién lo acompaña? Sin apoyo, es inviable”, advirtió.
Cultura desfinanciada, instituciones frágiles
El contexto general es de una contracción feroz del financiamiento público a la cultura. “Los museos están desfinanciados, no hay pago por exponer, no hay producción de muestra, no se paga a curadores ni a quienes escriben los textos. Todo funciona con alambre. Y si sale bien, es porque alguien le pone el cuerpo, no porque haya una política”, denunció Dahbar.
Esta falta de institucionalidad se traduce en un mayor peso sobre las gestiones independientes, que muchas veces son sostenidas por artistas y gestores con recursos personales limitados. “Necesitamos apoyo. A los artistas, a las galerías, a los espacios independientes", alertó, porque "el arte no es un lujo, es un bien simbólico, un lenguaje, una memoria, una pregunta. Y eso no se produce sin tiempo, sin recursos, sin trabajo”.
A pesar del panorama, la segunda Noche de las Galerías se planta como una apuesta optimista, colaborativa y colectiva. Dahbar expresó que lo que más se espera es que se amplíe el público. "Que no sea siempre la misma gente, que vengan nuevas personas, que se animen a mirar, a preguntar, a comprar. Que conozcan esta diversidad de producciones que hay en Salta, que descubran a sus artistas”, sostuvo.
Las actividades buscan precisamente eso: generar encuentros, abrir preguntas, ampliar los vínculos entre producción local, escena independiente y públicos diversos. Como señalaron en su parte de prensa, la “Noches de Galerías visibiliza el trabajo de artistas, curadores y gestores culturales, al tiempo que promueve la creación de nuevos vínculos entre públicos y producción local”.