El delegado sindical de Lácteos Verónica, Rodolfo Rodríguez, explicó por la 750 cómo sigue el conflicto al interior de la empresa santafesina, que en las últimas semanas pidió el procedimiento preventivo de crisis con el fin de achicar en 30 por ciento la planta, despidiendo a 210 trabajadores con una indemnización menor a la que corresponde.
Consultado por La Mañana, el trabajador explicó que es “es de público conocimiento” que el conflicto con la patronal lleva ya varios meses y que todo comenzó cuando la empresa empezó a “desconocer” los salarios y los aportes sociales.
“En todo este tiempo la crisis se profundizó hasta el lunes pasado, cuando recibimos la notificación de parte de Trabajo del pedido preventivo de crisis”, explicó sobre la cronología.
Ante esto, el gremio rechazó el pedido de la empresa y argumentó que no hay documentación que respalde el pedido de crisis de la empresa. En otras palabras, que la crisis es inducida, con el objetivo de ajustar y reducir los derechos laborales.
“Creemos que fue algo buscado, inducido, vaya a saber uno con el objetivo de qué. Eso lo saben únicamente los empresarios”, aseguró Rodríguez en un principio. Aunque luego sí llegó a afirmar algunas de las claves que se pueden ocultar detrás de esta crisis inducida.
“Entre lo que piden, piden un 30 por ciento de despido del personal. Serían 210 trabajadores. Ajustados al 247, que serían despedidos al 50 por ciento. Piden suspensiones aleatorias, la caída del convenio colectivo del trabajo –lo que implicaría una rebaja del sueldo del 50 por ciento–”, explicó-.
Y añadió: “Ellos manifiestan una crisis financiera, que no es más que riesgo empresarial. Yo sigo sin entender como obrero por qué los trabajadores seguimos siendo los financistas de los empresarios”.
“Estamos indignados. Somos de un pequeño pueblo cerca de Rosario y seguimos sin entender esto. Estamos indignados, estamos tristes. Por qué hacen esto, haciéndonos pender de un hilo”, finalizó.