Valentín Ezequiel Reales, tenía solo 15 años cuando desapareció a mediados de noviembre de 2016. Su familia denunció entonces a Rosario/12 que sospechaban que había sido atacado por una banda criminal con influencia en el barrio Cabín 9, donde residía, pero hasta el momento no hay datos sobre su paradero. La justicia federal investiga su caso y a provincia ofrece 10 millones de pesos de recompensa para quienes aporten datos sobre su desaparición. 

Valentín Reales creció en Cabín 9, el barrio fronterizo entre Pérez y Rosario. A los 15 años, y con seis sobre su espalda trabajando para la banda de Los Cuatreros, decidió contar su experiencia ante la justicia provincial para ponerle fin a esa historia, que detuvo a sus principales miembros, muchos de ellos adolescentes, pero poco hizo para protegerlo. Desde el 15 de noviembre de 2016 Valentín se encuentra desaparecido. Los relatos barriales ubicaron su cuerpo, brutalmente torturado y vejado, en un campo. Sin embargo cuando los rescatistas llegaron y excavaron, solo quedaba de él una zapatilla con sangre. Se presupone muerto, aunque las presunciones son más graves aún: como la que fue desenterrado la noche anterior al hallazgo, por alguien que tuvo la logística y la información sobre la medida judicial. No hay que especular mucho para pensar en sus responsables: la subcomisaría 18 del barrio fue denunciada por familiares y allegados a Valentín por su complicidad.

La banda de Los Cuatreros fue investigada y varios de sus miembros detenidos, pero poco se hizo para presenvar la seguridad del adolecesntes que como un virtual arrepentido ayudo a desarticular al grupo cirminal. Cabe recordar que el ministro de Seguridad de entonces no era otro que el actual gobernador Maximiliano Pullaro.  

El fiscal Guillermo Apanowicz fue el responsable de la búsqueda de Valentín. El mismo que ya había tenido una patética perfomance en el caso de Franco Casco y de Gerardo "Pichón" Escobar. La desaparición forzada implica la participación de fuerza estatales o la inacción de las mismas, por lo cual su aquiescencia permite la consumación del delito.Y la band de Los Cuatreros tenia protección policial, al punto tal que el propio Valentín se topó en la casa donde se resguardaba con el mismo policía que pasaba a cobrarle la coima por el búnker que el adolescente atendía bajo las órdenes de la misma banda . 

Ahora a instancias del fiscal general Javier Arzubi Calvo, el Ministerio de Justicia y Seguridad de Santa Fe ofrece el pago de una recompensa .La investigación sobre la desaparición de Reales se encuentra en trámite en la Oficina de Criminalidad Económica, Trata de Personas y otros delitos del Área de Investigación Casos Complejos de la Unidad Fiscal de Rosario, a cargo del fiscal federal Andrés Montefeltro. Además, interviene el Área de Atención y Acompañamiento a las Víctimas para la contención de la familia Reales.

Tras el pedido del fiscal Arzubi Calvo ante las autoridades provinciales, la Secretaría de Asuntos Penales del Gobierno de Santa Fe, a cargo de Lucía Masneri, determinó que el caso reunía los requisitos dispuestos en la Ley N°13.494, que creó el Programa Provincial de Protección y Acompañamiento de Testigos y Víctimas y el Fondo Provincial de Recompensas.

En ese contexto, ante las circunstancias en las que se cometió el hecho, su gravedad social y las dificultades para obtener información útil, se dispuso el ofrecimiento de la recompensa dineraria, previa autorización de la Secretaría de Coordinación Técnica y Administración Financiera del Ministerio de Justicia y Seguridad de Santa Fe, a cargo de Pablo Coccocini.

En la resolución, se establece que la identidad de quienes brinden información y de quienes sean adjudicatarios de la recompensa será mantenida en secreto antes, durante y después de finalizada la investigación y/o proceso judicial en los términos y condiciones previstos en el artículo 44 de la Ley N°13.494.

La información y los datos relativos a la causa podrán ser aportados al correo electrónico institucional [email protected], o en la sede del Ministerio Público Fiscal (MPF), Unidad Fiscal Rosario, en la calle Mitre 601/621.

También se puede acudir a la Unidad Fiscal Santa Fe, en Monseñor Zaspe 3277; a la Sede Fiscal Descentralizada San Lorenzo, Belgrano 1801; a la Sede Fiscal Descentralizada Rafaela, en bulevar Hipólito Irigoyen 316; a la Sede Fiscal Descentralizada Venado Tuerto, Chacabuco 743; a la Sede Fiscal Descentralizada San Nicolás, San Martin 78; y a la Sede Fiscal Descentralizada Reconquista, en San Martín 1158.

Además, se estipula que el pago de la recompensa será abonado previo informe del representante del MPF y de la Dirección Provincial de Protección de Testigos en relación al mérito de la misma. Del mismo modo, se procederá si fuese necesaria la distribución de la suma entre dos o más personas, a los fines de determinar los montos que correspondan a cada uno, según la utilidad y relevancia de la información que aporten para el esclarecimiento del hecho.

La desaparición de Reales, que residía en el barrio Cabín 9, fue fechada entre el 13 y el 15 de noviembre de 2016, pero la investigación se inició sobre fin de ese mes a partir de la denuncia de su madre. En un primer momento, se especuló con que el adolescente había sido atacado por una banda delictiva con influencia en la zona, límite oeste entre las ciudades de Rosario y Pérez, según señalaron algunos integrantes de la familia de Valentín.

La causa por la búsqueda de Reales primero se tramitó en el Ministerio Público de la Acusación (MPA) de Santa Fe, pero luego fue remitida a la Fiscalía Federal al calificarse como desaparición forzada.

El Ministerio de Justicia y Seguridad de Santa Fe trató el caso como de gravedad social. Pero como las medidas investigativas hasta el momento no arrojaron resultados positivos para obtener evidencia concreta que permita avanzar en el esclarecimiento del caso, conocer posible autor, autores o partícipes, se dispuso el ofrecimiento de la recompensa dineraria para aquellos ciudadanos que puedan aportar datos relevantes.