Los docentes públicos de la provincia, nucleados en Amsafé, reclamaron este miércoles frente a la sede provincial de Iapos, con el fin de visibilizar el mal funcionamiento de la obra social. Durante la protesta hicieron entrega de un petitorio denunciando los altos descuentos que sufren los maestros, en relación a sus salarios. “Hoy venimos a exigir que nuestra obra social garantice un derecho básico, como lo es el acceso a la salud, que tenemos que tener los trabajadores y trabajadoras”, señaló Rodrigo Alonso, secretario general de Amsafé. La jornada de protesta se dio en el marco de un plan de lucha por tres semanas, en el que están previstas diversas actividades.

Luego de rechazar el aumento del 7% para todo el semestre, los docentes pusieron en marcha un plan de lucha que tiene como objetivo dar a conocer las distintas problemáticas que atraviesa el sector. Durante la primera semana el foco está puesto en el funcionamiento de la obra social provincial, por eso la concentración se dio frente a la sede de Iapos, en la ciudad de Santa Fe. Allí elevaron un petitorio con 18.981 firmas de trabajadores de toda la provincia exigiendo mejoras dentro del organismo. Entre las críticas figuran el aumento de un 68% en el valor de los bonos, la exigencia de pagos adicionales en los servicios médicos y demoras en las devoluciones.

“Un maestro o una maestra tiene que aportar de 50 mil a 70 mil pesos a la obra social, solamente con el descuento obligatorio. Después está el Iapos solidario, que a marzo aumentó un 100%, cuando nuestro salario aumentó el 13%”, explicó Alonso en rueda de prensa. “Pero no solamente el problema es la gran cantidad de aporte que nosotros hacemos. Cuando querés ir al médico tenés que pagar la consulta, o un plus. Una tomografía nos está costando 60 mil pesos”, añadió.

Para el referente de Amsafé, esta situación se da por la falta de diálogo del gobierno. El 30 de junio los gremios estatales presentaron una nota conjunta dirigida al director de la obra social, pidiendo explicaciones sobre la administración de sus propios aportes. Un mes después, los sindicatos siguen sin respuestas. “Esta obra social se mantiene con los aportes de los trabajadores y somos los únicos que no formamos parte de las decisiones”, cuestionó.

En esa línea, el dirigente remarcó que los afiliados no tienen información de lo que sucede con sus propios recursos. “No sabemos qué se hace con nuestra plata. Parece que está más destinada a solventar a grandes grupos médicos y farmacéuticos y no a garantizar nuestro derecho a la salud”, expresó. Y agregó: “Por eso, dentro del plan de lucha de Amsafé, hoy venimos a exigir que nuestra obra social garantice un derecho básico, que es el acceso a la salud que tenemos que tener los trabajadores y trabajadoras”.

La protesta de Amsafé se da en conjunto con los docentes privados nucleados en Sadop, y los profesionales de la salud referenciados en Siprus. Son los gremios que rechazaron la paritaria provincial, donde el gobierno ofreció pagar un 7% semestral de forma escalonada: un 1,5% en julio y en agosto, y un 1% en cada uno de los meses siguientes hasta finalizar el año. Pese al rechazo, el gobierno provincial confirmó que no habrá una nueva oferta y abonará el aumento de julio por planilla complementaria.

En ese marco, Alonso definió la decisión como “una vergüenza” que rompe la negociación colectiva. “Mienten cuando nos dice que acá hay diálogo. Lo que hay es la imposición de una política de ajuste”, cuestionó. Para el referente de Amsafé, los números hablan por sí solos: esta semana se conoció la inflación de julio medida por el Instituto Provincial de Estadísticas y Censos (IPEC) arrojó una suba del 1,9%, que supera el 1,5% de aumento que el gobierno abonará a los docentes por lo trabajado en julio.