Después de más de una década de demoras, cambios creativos y expectativas acumuladas, Tron: Ares finalmente aterriza en los cines. La tercera entrega de la icónica saga de ciencia ficción de Disney vuelve a sumergirnos en el universo digital que revolucionó el género, esta vez con Jared Leto en el rol protagónico y bajo la dirección de Joachim Rønning.

El proyecto, anunciado y postergado innumerables veces desde 2015, se concreta ahora como una secuela directa de Tron: Legacy. Ambientada en un futuro donde los límites entre lo humano y lo artificial son cada vez más difusos, la historia presenta a Ares (Leto), un programa enviado desde el mundo digital al mundo real con una misión que podría alterar el equilibrio entre ambos universos. A su lado aparece Greta Lee, en el papel de una brillante científica que intenta controlar la tecnología que ella misma ayudó a crear, mientras que Evan Peters y Cameron Monaghan completan el elenco con roles aún rodeados de misterio.

Un legado tecnológico que sigue evolucionando

Desde su debut en 1982, Tron marcó un antes y un después en la historia del cine con su uso pionero de efectos digitales y estética cibernética. Su secuela, Tron: Legacy (2010), expandió ese legado visual con un estilo futurista deslumbrante y una banda sonora inolvidable a cargo de Daft Punk. Ahora, Tron: Ares busca actualizar esa herencia con una mirada contemporánea sobre la inteligencia artificial, el libre albedrío y la conexión entre humanos y máquinas.

Rønning y su equipo han destacado que esta nueva entrega combina efectos visuales de última generación con un enfoque más emocional, centrado en la humanidad emergente dentro del mundo digital. El director definió la película como “una historia sobre el alma en medio del código”, anticipando que el resultado será tanto un espectáculo visual como una reflexión sobre el vínculo entre tecnología y conciencia.

Entre demoras, huelgas y reinicios

El camino hasta Tron: Ares fue largo y accidentado. Disney suspendió el proyecto en varias ocasiones, y durante años pareció condenado a quedar en pausa indefinida. Recién en 2023 el rodaje tomó forma en Vancouver, tras superar las huelgas de actores y guionistas que paralizaron Hollywood. Leto, quien también produce la película, se mantuvo comprometido desde el inicio, impulsando su desarrollo incluso cuando parecía haberse enfriado.

El resultado final llega ahora en un contexto donde la inteligencia artificial domina la conversación cultural, otorgando una nueva relevancia temática a la franquicia. Tron: Ares se propone no solo como una continuación del universo original, sino como una actualización conceptual que dialogue con los dilemas tecnológicos del presente.

Una nueva era para el universo digital de Disney

Más de diez años después de Tron: Legacy, la saga renace con una propuesta visualmente ambiciosa que promete llevar a las audiencias a territorios inexplorados. La banda sonora, compuesta por Joseph Trapanese (colaborador de Daft Punk en la entrega anterior), retoma la esencia electrónica que define el ADN de la franquicia, con nuevas texturas sonoras que acompañan la evolución estética de este universo.

Con Tron: Ares, Disney apuesta nuevamente por el riesgo y la innovación, pilares que hicieron de la película original un clásico de culto. Entre la nostalgia por los mundos digitales del pasado y la fascinación por el futuro que ya está aquí, esta nueva entrega se presenta como el renacimiento de una saga que siempre estuvo un paso adelante de su tiempo.

Contenido optimizado con tecnologías de Inteligencia Artificial.