Los trabajadores despedidos del Ministerio de Ambiente continúan la permanencia pacífica en la sede de esa cartera que empezaron ayer a la tarde para exigir la reincorporación de los trabajadores a quienes no se les renovaron los contratos. El ministro Sergio Bergman decidió cancelar la reunión pautada con los delegados gremiales y pidió como condición para acceder al diálogo que los trabajadores levanten la vigilia. Esta mañana, la sede de San Martín al 400 amaneció rodeada por un amplio despliegue de seguridad que incluyó la entrada vallada y 40 efectivos de infantería en el interior del hall de entrada.

“Nos cancelaron la reunión que teníamos pautada con el ministro. Quieren que desalojemos el edificio para tener un diálogo y nosotros sabemos muy  bien que si desalojamos el edificio, no volvemos a entrar y no conseguimos nada”, contó Edith Ibánez, delegada de la junta interna de ATE.

Los 28 despidos fueron notificados el último día hábil de diciembre, cuando los empleados llegaban a sus puestos de trabajo. Ese día, policías apostados en la entrada, con el listado de cesanteados en mano, pedían identificación y restringían el ingreso a quienes figuraban como despedidos. Entre ellos había trabajadores con 20 años de antigüedad y una madre en período de lactancia.

“Fue muy fuerte ver todo el despliegue policial, nunca vimos algo así acá en el Ministerio. Alrededor de la una de la madrugada vinieron a poner las vallas y a montar todo el operativo”, sostuvo Ibáñez en declaraciones a la AM 750.

El ministro Bergman, que se disfrazó de planta para inaugurar un congreso y trajo dos televisores LED de Chile, suspendió la reunión pautada para esta mañana para destrabar el conflicto y pidió como condición para realizar el encuentro que los trabajadores levanten la vigilia.