La noticia de la cancelación de un viaje de Pelé a Londres disparó alarmas sobre su estado de salud, al punto de difundirse que el brasileño, de 77 años, estaba hospitalizado en su país. Un amigo y asesor del ex jugador de fútbol desmintió la noticia, tras los rumores que generó su ausencia en Europa.

"No se quién inventó esa noticia. Él fue a Río de Janeiro ida y vuelta esta semana en coche y fue estresante, un viaje agotador. Pero no se sintió mal", dijo a la prensa José Fornos Rodirguez, “Pepito”, hombre cercano a la ex estrella del Santos y la selección brasileña. Pelé tenía previsto llegar a la capital británica para un homenaje de la Asociación de Escritores de Fútbol de Londres.

Fue esa Asociación la que propaló la noticia de una internación, a través de un comunicado, en el que habló de "un severo colapso por agotamiento” del tricampeón mundial de fútbol, por el cual Pelé habría sido llevado al Hospital Israelita Albert Einstein de San Pablo "con fuertes dolores abdominales". Según el texto difundido, "permanece sedado mientras los doctores monitorean su recuperación. Su situación médica le impide viajar a Londres".

“Pepito” negó en forma categórica la internación, aunque sí reconoció que Pelé tuvo síntomas de cansancio y que en estos momentos "está en su casa haciendo fisioterapia". El viaje de Pelé a Río de Janeiro fue el lunes pasado para la ceremonia inaugural del campeonato carioca de fútbol. Allí se lo vio apoyado en un andador, debido a que todavía no se recuperó de una reciente cirugía en la cadera.

La salud de Pelé se ha deteriorado en los últimos años. Ha sido operado, no sólo en la cadera, sino también en los meniscos y en la columna vertebral, lo cual llevó a que en diferentes etapas se moviera con bastón, andador o silla de ruedas. A comienzos de diciembre pasado estuvo en Moscú, durante el sorteo del mundial Rusia 2018. Allí estuvo con un andador y se fotografió sentado, junto a Diego Maradona y Vladimir Putin.