La canciller Angela Merkel (foto) se refirió ayer a la “culpa histórica” de Alemania durante el Holocausto, en su tradicional videomensaje semanal. Su discurso es una referencia directa a la crisis diplomática entre Polonia e Israel a causa de la aprobación en Varsovia de una polémica ley sobre el la Shoah.

“Somos responsables como alemanes de las cosas que durante el Holocausto, la ‘Shoah’, pasaron durante el nacionalsocialismo”, declaró la mandataria y agregó: “Esta responsabilidad se mantiene y todos los Gobiernos de Alemania tendrán que asumirla”. En su alocución, Merkel se abstuvo de referirse directamente a la nueva ley aprobada en Polonia que prevé desde multas hasta penas de cárcel de hasta tres años para quienes atribuyan “públicamente y en contra de los hechos” al pueblo o al Estado polaco la responsabilidad o corresponsabilidad en los crímenes cometidos por la Alemania nazi. No obstante, su opinión fue clara. Ya esta semana el Ministro de exteriores alemán había declarado que no había ninguna duda de que los alemanes habían sido los responsables de los campos de exterminio. Críticos desde Estados Unidos e Israel expresaron sus temores a que Polonia pueda así rechazar su propia responsabilidad y la participación de ciudadanos polacos en el Holocausto contra los judíos. La disputa por la ley desató una grave crisis diplomática entre Israel y Polonia.

El próximo viernes la canciller recibirá en Berlín al primer ministro polaco, Mateusz Morawiecki.