También el tenis humilla a las mujeres. En la última edición del torneo Conde de Godó, que se disputa en abril el Real Club de Tenis Barcelona, como antesala a Roland Garros, hicieron trabajar a ocho promotoras con minifalda y manga corta a pesar de las gélidas temperaturas. La Inspección de Trabajo en España acaba de sancionar a la empresa patrocinadora, Schweppes y a la agencia de azafatas Tote Vignau por cometer una infracción laboral muy grave, tras concluir que incurrieron en un acoso discriminatorio por razón de sexo. Las condiciones de trabajo de las chicas había sido denunciada por la Unión General de Trabajadores (UGT), central sindical española. Según la UGT, el acta de infracción implicará multas que oscilarán entre 10.000 y 187.000 euros. Además, la Inspección de Trabajo requirió al Real Club de Tenis Barcelona, donde se celebra el tradicional trofeo, para que garantice la coordinación de las actividades empresariales en prevención de riesgos laborales durante el torneo. En la edición 2017, las promotoras se quejaban diariamente por tener que desempeñar su trabajo en esas condiciones, a pesar de las bajas temperaturas y las lluvias, pero la firma no tomó en cuenta sus protestas. Cada día, terminaban con fiebre, contaron varias. “Siempre somos chicas. Chicas, minifalda y enseñando carne. El caso es que no podíamos llevar la chaqueta porque no se veía bien la marca, que también está en el paraguas. Se tenía que ver el vestido, y si pasábamos frío daba igual”, contó una de las trabajadoras.