“Yo soy una convencida de que la justicia llega. Tengo la esperanza de saber algún día cómo se gestó el atentado a la AMIA. Pero ya no tengo esperanzas de que estas personas vayan presas. Esa es la esperanza que he perdido”, plantea Diana Malamud, que apunta a que se investigue el encubrimiento en la investigación que encabezó el ex juez Juan José Galeano. La agrupación Memoria Activa, de la que es miembro, no participó del acto, sino que hizo otro el lunes.

–¿Cómo evalúa los discursos del acto de ayer?

–Nada me sorprendió. Hablaron de Irán, como era de esperar. Y nada sobre el encubrimiento y, por supuesto, ninguna mención al encubrimiento por parte de la dirigencia comunitaria judía.

–Se refiere a Rubén Beraja.

–Beraja es la cabeza, pero todos los demás son lo mismo. El actual presidente era el tesorero durante el atentado.

–¿Coinciden con las críticas al Gobierno?

–Bueno, sí. El gobierno de Kirchner tiene una gran responsabilidad, que la asumió de palabra, y ha puesto recursos en esta causa. Pero es necesaria una decisión política que no parece estar. No alcanza con la decisión del Presidente, sino con que los que están abajo lo ejecuten. Uno sabe cómo responde el Poder Judicial y así han actuado históricamente en nuestro país. Por un lado, tenemos la causa principal, cuyo responsable es (Rodolfo) Canicoba Corral. Tienen que mostrar lo que han trabajado, ya que dicen que han trabajado. Queremos ver el expediente. Sabemos que es arduo, que se perdió mucho. Doce años después es muy difícil de hacer.

–Pero usted piensa que puede haber justicia.

–Siempre puede haber. Pero cada vez es más difícil. Una cosa es después del atentado y otra es cuando se empieza a horadar una piedra. Se crearon mentiras y pistas falsas. Creemos que fue un grupo fundamentalista y que Menem sabía que podía haber un atentado y no lo previno. El Gobierno actual asumió la responsabilidad de afianzar la causa principal y también está la causa por encubrimiento.

–¿Cómo evalúa el avance de esa causa?

–El juez (Ariel) Lijo llamó a indagatoria y tendrá que ver si existen las pruebas para procesarlos. Consideramos que hay pruebas para ir más arriba. Los que trabajaron para que no sepamos la verdad tienen que pagar por lo que hicieron. Porque si no, no tenemos democracia. Tuvimos una muy buena experiencia en el juicio oral, a diferencia de lo que se planteó en el acto, en el que siguieron diciendo que van a apelar la sentencia.

Reportaje: W. P.