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Jueves, 18 de marzo de 2010

GABRIEL ANDRUZZI, DE THE RAPTURE, Y SAMMY JO, DEEJAY DE SCISSOR SISTERS

Jugo de manzana frío

Las venas abiertas de la escena electrónica neoyorquina se abren en Buenos Aires. “Mucha de la emoción del ritmo fue erradicada del rock and roll por los británicos y los blancos racistas estadounidenses”, se despacha Andruzzi.

 Por Yumber Vera Rojas

Después de muchos años de silencio, Nueva York, ciudad espectadora del auge de la disco music, de la infidelidad del post punk con el funk, de la aparición del electro, del nacimiento del garage house y del flirteo entre house y hip-hop, recuperó su status de capital mundial de la música dance. Y lo hizo evocando su pasado glorioso, aunque con un tinte moderno. Buenos Aires fue también testigo de este despertar con visitas que fueron desde Andy Butler (Hercules and Love Affair) y Juan MacLean hasta LCD Soundsystem, al igual que leyendas de la categoría de Danny Tenaglia y Roger Sanchez, tanto en clubes como en festivales. De hecho, el brillante DJ set que brindó la dupla Holy Glore! –el fin de semana que pasó en Buenos Aires– justifica el buen momento que experimenta la escena electrónica en la Gran Manzana, que será ratificada esta semana y la otra con la primera visita de Sammy Jo, deejay apadrinado por Scissor Sisters, y el regreso de los fenomenales The Rapture.

“Tengo un amigo que fue a Buenos Aires, y me contó que la gente es muy buena onda y que la noche es divertida y salvaje. Así que es un lugar soñado para todo DJ”, deduce Sammy Jo, desde su Nueva York natal y a días de su performance en la capital argentina. Conocido como el deejay oficial de Scissor Sisters –luego de que la banda lo invitara a participar en su gira Crevice Canyon en 2004–, su relación con los neoyorquinos se dio a partir de su amistad con Jake Shears, vocalista del quinteto. “Nos conocimos hace diez años en la fiesta Click + Drag. Al tiempo que yo pasaba música, él hacía de go-go dancer. Más tarde empezamos a hablar, y se dio la casualidad de que éramos vecinos.” No obstante, su aproximación a las bandejas se produjo poco tiempo antes, en 1997, en la discoteca Mother –de su ciudad de origen–, experiencia que sirvió de preámbulo para su primera aventura de club nocturno en el Messy. “Estaba trabajando como secretario en el Mother. Un día sin mucha gente empecé a pasar unos discos y el dueño del lugar se me acercó para preguntarme cómo aprendí a mezclar. Le dije que no me dedicaba a eso, entonces me respondió que debía pensar en hacerlo.”

Los sets de Sammy Jo están cargados de electro house, pop y disco music. “Me gusta la música nueva, pero mucha está inspirada en géneros más antiguos. Por eso encuentro una gran relación entre el electro house y la disco music. La disco que paso es oscura, sucia y distorsionada. No va por el lado de ABBA sino por Giorgio Moroder.” Si bien su trayectoria se concentra en las bandejas, el DJ está produciendo remixes, incluso hizo uno de I Feel Don’t Like Dancer de Scissor Sisters y ahora está terminando otro tema del nuevo disco. “Espero poder pasarlo allá”, as pira. Sobre el inminente álbum del conjunto liderado por su amigo Jake, Sammy adelanta al NO: “El nuevo disco va a estar en las bateas en el verano estadounidense. Lo escuché y es increíble, está orientado principalmente a la pista de baile. Apenas sea editado, van a salir de gira. Quizá regrese con ellos a Buenos Aires”. Antes de su debut acá, Jo describe la escena dance de Nueva York: “Hay muy buenas fiestas, pero existe la sensación de que con eso no basta. Se necesita más música dance. Sin embargo, está mejorando”.

Mientras The Rapture se encuentra en París ultimando los detalles de su nuevo disco, Gabriel Andruzzi, integrante del hoy trío, se toma unos minutos para responder vía e-mail: “Paso música en fiestas y clubes, toco el saxo, el sintetizador, el cencerro y el bajo. Tengo unos hermosos ojos azules, y un corazón sensible”. Luego de su estreno en el país en 2007 con un Gran Rex demoledor, los miembros del grupo retornaron el año pasado como DJs. Y ahora vuelven con este formato. “Nos encanta la música, compartir con la gente y bailar. Cuando conocí a Luke (voz y guitarra), él trabajaba en el legendario Plant Bar, donde todo tipo de DJs internacionales solían tocar (2ManyDJs, The Chemical Brothers, James Murphy). Es un lugar pequeño y divertido. Lo usamos aún para organizar una fiesta semanal.” Acerca del set que brindarán, Andruzzi advierte: “Va a ser completamente loco. Disfrutarán del dance más increíble del mundo. Al final todos llorarán de la emoción. Siempre siento mucho amor cuando estoy allá. ¡Buenos Aires, gracias por amarme!”.

El sucesor de Pieces of the People we Love (2006) no tiene fecha de salida. Andruzzi revela: “Musicalmente será diferente a los anteriores. No tiene nombre, y no estoy seguro de cuándo vaya a salir. Estoy en el estudio en este momento trabajando con nuestro productor, Philippe Zdar (integrante de los franceses Cassius). Es increíble lo que hicimos juntos, y nos divertimos mucho durante su realización”. Uno de los grandes ausentes de este cuarto larga duración es el bajista Matt Safer, quien abandonó la banda en 2009. Este cuarto álbum se produce una década después de la aparición de su ópera prima, Mirror (1999), uno de los títulos que inauguró la nueva era del dance punk. “Esperamos seguir legando canciones atemporales que la gente disfrute una y otra vez. Nunca nos vamos a aprovechar del momento para hacer música, no queremos relacionarnos con nada que esté de moda. Salimos a hacer música para alimentar el alma, el corazón y el amor de las personas.”

Andruzzi toma distancia de la etiqueta dance punk: “Los periodistas están invitados a llamarnos como quieran. Particularmente creo que no existe ninguna escena dance punk”. Pero lo que no puede negar The Rapture es que fue uno de los responsables de la reorientación del rock a la pista de baile. “Creo que mucha de la emoción del ritmo fue erradicada del rock and roll por los británicos y los blancos racistas estadounidenses que trabajaban en el negocio de la música y en los medios de comunicación en los ‘60 y los ‘70. El rock and roll y el R&B eran, por definición, música dance. Los chicos fueron a la búsqueda de esos géneros para agitarse y moverse. Todo lo que hacemos es mirar a nuestras raíces e incorporar las cosas que amamos de la música”, afirma Andruzzi. Además, esta banda fue una de las responsables de la reactivación de la movida indie en Nueva York, que tiene en los maravillosos The Hundred in the Hands a su nueva sensación. “Son buenos amigos, ¡me encantan! Hay también un dúo denominado Populette, que hace house. No obstante, mi banda favorita se llama Las Palabras.”

* Sammy Jo actuará el martes 23 en La Trastienda. a las 23.30. El DJ set de The Rapture será el sábado 27, en Studio Crobar, a las 23.

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