Ante Oyarbide, el mayor de los hermanos Schoklender sostuvo que "la única irregularidad que a su criterio podría haber existido" en el manejo de los subsidios "correspondió a Alejandra Bonafini ya que era quien los gestionaba". Y aunque, según la investigación judicial, Schoklender formaba parte del Consejo que tomaba las decisiones, en su declaración explicó que se había creado una estructura de gestión dividida por áreas a partir del volumen que adquirió el programa.
Tras concluir la declaración, el exapoderado volvió a ser llevado a la cárcel de Ezeiza luego de que el juez rechazara un nuevo pedido de excarcelación presentado al cabo de la audiencia.
Para citarlo a indagatoria, Oyarbide ya considera probado que "una gran cantidad de fondos del Estado Nacional para la afectación concreta en el plan de viviendas salieron de la Fundación autorizados por quienes, en su entonces, revestían el carácter de apoderados".
Además de Sergio, están detenidos e imputados de integrar la misma asociación ilícita sus hermano Pablo y el contador Alejandro Gotkin, que actuaba como presidente de las empresas Meldorek S.A. y Antártica Argentina S.A, que actuaban para el programa de viviendas sociales.
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