Anoche los campesinos levantaron las carpas que estaban a la vera de la ruta 81 en el límite entre Hickman y Dragones. Lo hicieron tras llegar las bolsas de maíz comprometidas por el Gobierno.
Un acta compromiso indicaba que el alimento para los animales iba a llegar hoy. Pero una falencia en los papeles del transporte generó la imposibilidad para que llegue.
El compromiso se plasmó en un acta firmada por la Secretaría Asuntos Agrarios y referentes campesinos. Algunos perdieron hasta el 50% de su producción animal.
En la segunda visita que hicieron en la zona, funcionarios del gobierno provincial se reunieron con los campesinos que cortaban las rutas.
Son representantes de familias criollas. Reclaman agua y comida para los animales que crian. Una nueva sequía azota la región y no hay respuesta alguna.
En tres días a una sola productora se le murieron 20 animales. Ni la Nación ni la provincia respondieron a sus pedidos de agua y forraje. Una alternativa de solución es que les den agua desde la finca El Yuto.
Atta Gerala es cuestionado por haber ‘escondido’ una retroexcavadora. La herramienta gestionada hace 5 años servía para limpiar cañadas y guardar más agua de lluvia con la que soportar la temporada seca.
Campesinos del Chaco salteño reclamaron en la Legislatura. A nivel país preocupa un nuevo ciclo de sequía. El fenómeno, que se repite, sólo afecta a los productores más chicos.
Familias campesinas piden asistencia del Estado, con agua y forraje para los animales. También escasea el agua para el consumo humano.
La ecorregión del Chaco salteño ya da muestra de las consecuencias del fenómeno y temen que empeore en lo que queda del año.