Fue el mayor número de ataques contra los insurgentes desde que Washington reiniciara su campaña militar a mediados de marzo.
El asesor de Seguridad Nacional, Mike Waltz, asumió la responsabilidad de los mensajes enviados en un chat sobre un ataque realizado en Yemen, que los rebeldes hutíes afirman causó 53 muertos y 98 heridos.
El presidente dijo que su asesor de seguridad nacional Michael Waltz, cuya cuenta en Signal fue la fuente de la filtración, "aprendió la lección" y tildó al periodista de "depravado".
Por la agresión estadounidense del sábado contra varios de sus bastiones, incluida la capital Saná, las autoridades reportaron 53 muertos, incluidos cinco niños, y 98 heridos.
Naciones Unidas señaló que el aeropuerto de Saná y el puerto de Al Hodeida, ambos bombardeados el jueves, no son utilizados como infraestructuras militares por los hutíes.