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Hernán Crespo, el delantero y autor del gol con el que el seleccionado argentino le ganó a Ecuador, admitió que al equipo “le faltó un poco de lucidez”, aunque destacó haber conseguido la victoria. “Fue un partido duro. Nos faltó un poco de lucidez. Sentimos la falta de conocimiento. Pese a eso, el equipo trató de manejar la pelota, aunque nos costó ser efectivos en el pase gol. Igualmente lo importante fue haber ganado”, aseguró Crespo, que prometió que en junio “se va a mejorar, porque en la Copa América vamos a tener más tiempo para conocernos”.
Crespo, quien le marcó su cuarto gol a Ecuador, se mostró “muy feliz” por haber convertido, pero a la vez molesto por la actitud de la gente.
“La verdad, molesta un poco jugar con ese murmullo. Los hinchas vienen a ver un buen espectáculo y nosotros tratamos de darlo. La actitud y las ganas están, pero a veces no alcanza. Tienen que tener un poco de paciencia”, opinó. El delantero fue uno de los jugadores más resistidos por el público que concurrió al Monumental.
Crespo se refirió a la mezcla de jugadores de experiencia con los más jóvenes y trazó un paralelismo con el equipo que condujo Daniel Passarella al Mundial de Francia 1998. “Acá hay un equipo en formación. Me hace acordar mucho al de Passarella en las eliminatorias para el Mundial de Francia”, señaló e inmediatamente diferenció a este equipo del que jugó las eliminatorias pasadas.
“Las eliminatorias pasadas fueron increíbles. Es que había un equipo con experiencia, ya tenía un Mundial encima. Creo que la gente se acostumbró a eso. Pero tienen que acordarse que a Argentina siempre le costó llegar a un Mundial”, apuntó.
Sobre el hecho de que Bielsa hubiera convocado a casi todos los jugadores que pedía la gente, Crespo dejó en claro que no es contraproducente tener grandes jugadores tanto en la cancha como en el banco. “¿Cómo va a ser malo eso? –se preguntó–. Lo mejor que le puede pasar al fútbol argentino es tener una nueva generación con capacidad. Después nos toca a los de mayor experiencia manejar las situaciones.”
Crespo dijo estar “muy contento, porque se ganó un partido complicado. Había que abrirlo así. Por suerte se dio con un gol mío. Después la gente quería más goles. Pero no había piernas para flores”.
El capitán del equipo, Roberto Ayala, aceptó que al equipo “en los últimos metros le faltó un poco más de claridad”, pero destacó que “se debe tener en cuenta que la intención fue ir para adelante, siempre jugar y romperse por la camiseta. Por supuesto que la idea era ganar y si era por la vía del buen fútbol mejor. No fue fácil. Adelante tuvimos a un equipo que complicó también”.