DEPORTES › OPINION

La dimensión del morbo

 Por Pablo Vignone

“Otra vez Maradona juega con su vida”, se lee en algunos titulares. “Maradona tiene que entender que si no se cuida él...”, le avisa didáctico un conductor de TV que cuando Diego hacía maravillas con la pelota ni siquiera había nacido. “¿Pero es alcohol o droga?”, se escucha preguntar en la radio a especímenes que no dudarían un instante en llevar al estrado judicial a cualquiera que preguntara lo mismo con respecto a ellos.

Este nuevo episodio mediático relacionado con la salud del 10 demuestra –por si hacía falta– la ferocidad con que la sociedad argentina le prohíbe a Diego Maradona hacer uso de su vida privada. Por definición, todo lo que el astro haga con su vida es público, sujeto a escrutinio, pendiente de la aprobación que exige en general la moralina cotidiana de pantallas y planas. Hasta sus ausencias prolongadas, cuando se producen, resultan motivo de especulación sobre oscuras razones que podrían tener que ver o, directamente, ser causantes de esos apagones.

Si hemos de hacer caso a lo que se predica, Maradona está obligado a cuidarse eternamente para bien de nosotros, sus fanáticos. No puede excederse con una achura. Ni con una copa. Mucho menos con un puro y ni qué hablar de una línea. Maradona, que todo lo tuvo y que buscó más que eso, está conminado a portarse como un asceta para no hacer jueguito con su vida. Ni siquiera se le permite el derecho de preferir no crecer, antes que la madurez autopreservativa. Y siempre se lo juzga con más facilidad que con la que se trata de comprenderlo.

La dimensión de la decisión personal, en Maradona, está acotada por el morbo, no ya del que quiere saber, sino del que quiere mantenerlo aun con respiración artificial, aun embalsamado. Y eso suena terrible. Tan espantoso como tener todos los días, todas las mañana y tardes, todas las noches, una cámara curioseando por encima de tu hombro.

Compartir: 

Twitter

 
DEPORTES
 indice

Logo de Página/12

© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados

Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.