EL MUNDO

Los colonos al poder para darle gobierno a Sharon

En una jornada violenta en la Franja de Gaza, el premier Ariel Sharon incorporó al Partido Nacional Religioso para lograr mayoría parlamentaria. Ahora tendrá 61 del total de 120 diputados.

Por Conal Urquhart*
Desde Jerusalén

Las incógnitas sobre el gobierno israelí quedaron ayer despejadas. El partido del premier Ariel Sharon, el Likud, alcanzó un acuerdo para la formación de un gobierno de unidad nacional con el partido centroderechista laico Shinui y con el Partido Nacional Religioso (PNR), que representa a los colonos judíos en territorios autónomos palestinos. De este modo, el Partido Laborista, que luego había negado pero después consideró la posibilidad de sumarse a este gobierno, se salió de las negociaciones. Ahora Sharon dispondrá de una mayoría exigua en el Knesset (Parlamento israelí), con 61 de las 120 bancas existentes. Mientras los políticos negociaban, el ejército israelí incursionó con más de 20 tanques en la ciudad de Beit Hanún, al norte de Gaza, dejando seis muertos. En el sur de esta región, un soldado israelí y un palestino de 15 años murieron en dos incidentes separados. Y hubo más violencia en Cisjordania, donde murió un chico de 14 y otro palestino que había sido herido el sábado.
El líder laborista Amram Mitzná dijo que Sharon perdió “una oportunidad histórica” al negarse a acordar una estructura de paz con los palestinos. En cambio, Sharon ha elegido al Partido Nacional Religioso como compañero en la coalición. El mayor distrito electoral del PNR son los colonos de Gaza y Cisjordania. Y este partido rechaza cualquier evacuación de colonos y la formación de un Estado árabe entre el Mediterráneo y el río Jordán. El tercer socio en el nuevo gobierno será el Shinui. De hecho, el Shinui y el PNR llegaron a un acuerdo que les permite entrar en el mismo gobierno. El PNR ha aceptado apoyar la derogación de leyes que permiten a los estudiantes religiosos evitar el servicio militar, además de otras leyes que permiten ciertos casamientos civiles.
A pesar de que, al principio, Mitzná había descartado unirse a un gobierno con el Likud, dijo que estaba dispuesto a cambiar su posición si recibía del primer ministro una garantía escrita de las negociaciones de paz con los palestinos y la evacuación de asentamientos. Ayer, Sharon le dijo a Mitzná que no podría mantener fuera del gobierno a un partido sionista y nacionalista como el PNR, como exigía el laborismo. El primer ministro también dijo que el Partido Laborista podía unirse al gobierno más tarde.
Algunos miembros del Likud creen que el estallido de la guerra en Irak podría obligar a Mitzná a unirse a un gobierno de unidad nacional. Sharon, que ha dicho estar dispuesto a hacer “dolorosas concesiones” para alcanzar la paz, ahora se encuentra confiando en el PNR, que no cree en ninguna concesión seria para los palestinos. Miembros del Partido Laborista dijeron que piensan que ésta es la prueba de que Sharon no desea hacer la paz con los palestinos. Avraham Shochat, miembro del Parlamento, dijo que era imposible tener al laborismo y al PNR en el mismo gobierno. “En mi opinión, basada en el acuerdo entre el Likud y el PNR, Sharon eligió claramente a un gobierno de derecha y extremista que no perseguirá un proceso de paz”, le dijo a la radio del ejército. “No estaba preparado para incluir en los principios a ninguno de los elementos mínimos que le hubieran permitido al laborismo abrir las negociaciones.”
El laborismo tendrá ahora que reconstruirse luego de quedar reducido a 19 bancas en el Knesset, el número más bajo en la historia del partido. Las maquinaciones políticas tendrán poco efecto en el nivel de violencia de los territorios palestinos. El capitán Sharon Feingold dijo que el ejército realizó una nueva incursión a Beit Hanún luego de que 220 morteros y cohetes fueran disparados desde allí hacia la ciudad israelí de Sderot. Según fuentes palestinas, seis personas murieron a manos de los israelíes cuando 20 tanques, apoyados por helicópteros armados, entraron a esta ciudad del norte de Gaza. El ejército demolió cuatro casas que pertenecían a sospechosos de terrorismo, pero no pudo confirmar si hubo muertes. “Hay una pelea feroz y, en algunos casos, disparamos proyectiles,pero sólo hacemos blanco sobre la gente que lo hace sobre nosotros”, dijo el capitán Feingold.
A pesar de que los disparos sobre Sderot hasta ahora causaron unas pocas heridas, el ejército teme que Hamas mejore su tecnología, o tenga suerte en uno de sus ataques, y haya víctimas fatales. En el sur de Gaza, un soldado israelí murió cuando un miembro del Frente Democrático para la Liberación de Palestina le disparó en Jan Yunes. Más tarde, un chico palestino de 15 años falleció baleado en la misma ciudad. También murió un hombre armado cuando trataba de atacar el asentamiento de Netzarim, en Gaza. En Nablús, un chico de 14 murió cuando un grupo de soldados israelíes buscaba fugitivos. En Tulkarem, un palestino que no se detuvo cuando unos soldados se lo ordenaron murió de un balazo.

* De The Guardian de Gran Bretaña. Especial para Página/12.
Traducción: Milagros Belgrano.

Compartir: 

Twitter

En la derecha de la foto, un soldado israelí levanta el cadáver de un palestino.
La incursión en Beit Janún (Gaza) implicó a 20 tanques. Allí murieron seis palestinos.
 
EL MUNDO
 indice

Logo de Página/12

© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados

Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.