EL MUNDO › UN MAL SIGNO PARA EL 2004 TRAS EL APOYO DADO A BUSH

Aznar está solo en su rompecabezas

Las elecciones regionales y municipales de ayer se anticipaban como un referéndum sobre la decisión de llevar a su país hacia la guerra. No fue totalmente así, y su desplome electoral fue menor al previsto, pero manda una señal de alarma para las elecciones generales de 2004.

La gente volvió a decir “No a la guerra”. El Partido Socialista Obrero Español (PSOE) superó con más de 200.000 votos al Partido Popular (PP) de José María Aznar en los comicios municipales del domingo. Sin embargo, el PP obtuvo más concejales que la oposición socialista y, en la práctica, mantendrá el control sobre la mayoría de las grandes ciudades, Madrid incluida. Su secretario general, Javier Arenas, dijo que la elección del PP fue un “éxito rotundo”. Y sugirió a los socialistas que reflexionen sobre su “fracaso”. Pero el líder del PSOE José Luis Rodríguez Zapatero se adjudicó la “clara” victoria de su partido y declaró la derrota de Aznar.
El PSOE aventajó por 200.000 votos al PP, pero la diferencia entre los dos partidos se reduciría a unos 100.000 votos si se toman en cuenta los sufragios de Navarra para la Unión del Pueblo Navarro (UPN), un partido regional conservador aliado al PP. Así, el Partido Socialista se ubica apenas a un 0.4 por ciento por encima de sus rivales, algo que no ocurría en España desde hace diez años. El partido del presidente Aznar obtuvo 23.286 concejales contra los 22.915 del PSOE. Comparadas con las elecciones municipales anteriores de 1999, el domingo pasado el PP perdió 1337 concejales y el PSOE ganó 998. Pero, en la práctica, el partido oficialista mantendrá el control sobre la mayor parte de las grandes ciudades e incluso logró aumentar su mayoría absoluta en Madrid, alcaldía que dirige desde hace 14 años. Además de la capital española, el PP gobernará Valencia, Málaga, Zaragoza, Vitoria y Valladolid. Barcelona y Sevilla fueron para los socialistas, que sin embargo tendrán que hacer pactos con otros partidos para mantener sus dos alcaldías.
El secretario general del PP, Javier Arenas, dijo que la elección de su partido fue un “éxito rotundo”. Y le recomendó a la oposición, especialmente al líder socialista José Luis Rodríguez Zapatero, que reflexione sobre su “fracaso”. Para Arenas, los resultados del domingo fueron “un éxito del PP y claramente un éxito personal” del presidente Aznar. Dijo que existe la posibilidad de que el PP pueda pactar con los socialistas para sacarles algunas alcaldías a los nacionalistas del País Vasco. En esa región, donde sólo se celebraron comicios municipales, aumentó el voto nacionalista moderado que atrajo a gran parte de los radicales independentistas del partido Batasuna, recientemente prohibido por la Justicia española por sus vínculos con la ETA. Además, Arenas se mostró confiado en que “una posición coherente” de los socialistas permita llegar a un acuerdo.
“Cada uno es libre de poner los adjetivos que quiera a la victoria de los socialistas”, contraatacó Rodríguez Zapatero, que el domingo hizo su primera elección como líder del PSOE. Después de reunirse con la cúpula de su partido, declaró que la victoria del PSOE ha sido “clara” porque éste logró 200.000 votos más que el PP. También dijo que Aznar no ha superado el “plebiscito” de esta votación que, en cambio, a él le permitirán encarar “con buen pie” las presidenciales del año que viene. Mientras, el líder de Izquierda Unida (IU), Gaspar Llamazares, dijo que está “satisfecho” con la elección que hizo su partido y anunció que éste ya es “una fuerza determinante” en los gobiernos de comunidades como Madrid o Asturias, donde podrá pactar con el PSOE. Llamazares destacó que IU aumentó sus votos en un 1.5 por ciento respecto de las elecciones de 1999. Después de conocer los resultados definitivos, los partidos empezaron a estudiar posibles alianzas. Y todavía falta despejar la incógnita de la Comunidad Autónoma de Madrid, que podría ser gobernada por una coalición de izquierda. La región madrileña es una de las más disputadas: el PP y su rival, el PSOE, tienen un estrecho margen de diferencia. El PP fue el más votado en la región, pero como los socialistas y la IU juntos suman más escaños en el Parlamento, una alianza entre ellos podría sacar del Ejecutivo a los conservadores, por primera vez en los últimos ocho años. Además de Madrid, otras cinco de las trece regiones donde se celebraron elecciones dependen de pactos para la formación de nuevos gobiernos: Navarra, Cantabria, Aragón, Asturias y las Islas Canarias. El PSOE tuvomayoría absoluta en Extremadura y Castilla La Mancha, mientras que el PP podrá gobernar sin problemas en Castilla y León, Murcia, Valencia, La Rioja y Baleares. También ganó en las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla, al norte de Africa.

Compartir: 

Twitter

José María Aznar, primer ministro español, rodeado de un entorno cada vez más gris.
SUBNOTAS
 
EL MUNDO
 indice

Logo de Página/12

© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados

Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.