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La oposición de centroizquierda se arrogó una sensible victoria en las elecciones provinciales y comunales de Italia que finalizaron ayer después de dos días, y su candidato parecía listo para arrebatarle el control del gobierno provincial de Roma a la coalición de centroderecha del primer ministro Silvio Berlusconi. En caso de confirmarse el triunfo de la oposición en la provincia de Roma, la coalición conservadora de Silvio Berlusconi afrontará una dura derrota, luego de que el premier definiera como “muy importante” el test electoral en esa provincia.
La segunda jornada electoral regional celebrada en Italia se cerró ayer con un virtual triunfo de la izquierda en la provincia de Roma, según datos provisorios, mientras la coalición que lidera el premier Silvio Berlusconi mantiene algunos de sus bastiones, en particular en Sicilia. Los colegios cerraron sus puertas después de haber permanecido abiertos 14 horas el domingo y 8 el lunes, sin más incidentes que los cambios de ubicación de centros electorales y el extravío de tarjetas de acreditación, que complicaron la vida a miles de personas. El recuento de votos en las elecciones parciales, con cerca de 11,5 millones de ciudadanos llamados a las urnas, comenzó ayer a las 15, hora de Italia. En estos comicios se renovaran los gobiernos de dos pequeñas regiones –Valle de Aosta y Friuli Venezia Giulia–, doce provincias (diputaciones provinciales) –entre ellas la de Roma– y 489 municipios. De estas poblaciones se destacan Brescia, Vicenza, Pisa, Pescara, Mesina, Ragusa, Treviso, Sondrio y Massa, todas ellas capitales de provincia.
Se prevé una segunda vuelta electoral los días 8 y 9 de junio, entre los dos candidatos más votados, siempre que ningún concurrente consiga en la primera ronda el 50 por ciento más uno de los sufragios. En coincidencia con esas dos nuevas jornadas electorales, más de 1.200.000 electores podrán elegir los gobiernos de las pequeñas regiones norteñas de Friuli, Venezia Giulia y Valle de Aosta.
Los resultados de estas elecciones administrativas parciales servirán también para medir la correlación de fuerzas entre el gobierno y la oposición dos años después de Berlusconi en el poder. Una economía titubeante, un proceso judicial por corrupción que involucra al primer ministro en vísperas de que asuma como presidente de turno de la Unión Europea, así como su decisión de respaldar a Estados Unidos en la guerra contra Irak eran, según los expertos, algunos de los puntos que se sometían al escrutinio de los votantes.
Tanto el centroderecha en el poder como la oposición de centroizquierda consideran que los beneficia un alto grado de participación, que en la primera jornada fue del 63 por ciento para las provinciales y del 74 por ciento para las municipales. El candidato de la derecha, del partido Alianza Nacional, recibió el apoyo abierto de Berlusconi, quien se sometía a la primera prueba electoral desde que llegó al poder hace dos años.
De las doce provincias en disputa, seis están gobernadas actualmente por la alianza gubernamental conservadora y las otras seis por la oposición de El Olivo, que cuentan, respectivamente, con 5 y 4 alcaldes en las capitales de provincia en liza.
Según los cálculos de Democráticos de Izquierda (DS, principal partido de la oposición), Gasbarra supera el 53% de los votos en la primera vuelta, aunque por ahora ningún partido se ha adjudicado la victoria, hasta que no se conozcan los datos definitivos. Los miembros del gobierno evitan por ahora pronunciarse sobre lo que podría ser una significativa derrota para Berlusconi. La derecha posiblemente mantendrá los gobiernos provinciales que poseía en Sicilia, en donde se votó en ocho provincias.
Sobre los comicios territoriales romanos, el Olivo había tejido buena parte del éxito o el fracaso y de ahí que sus dirigentes se aprestaran a subrayar lo que consideran una importante victoria. En su afán por arrebatar a la alianza gubernamental cualquier retazo del gran poder que ha amasado en los últimos años, el centroizquierda también celebró conjúbilo sus avances en Sicilia, donde, sin embargo, mantuvo su primacía La Casa de las Libertades.