Los directivos de General Motors y el gremio Smata no pudieron sellar un acuerdo para superar el conflicto por el despido de más de 400 trabajadores de la planta que la automotriz tiene en la localidad santafesina de Alvear. Por otra parte, ante las dificultades en la industria de la carne, se informó que el Ministerio de Trabajo entregará un subsidio de entre 300 y 600 pesos por trabajador cuando las empresas documenten de manera “fehaciente” la imposibilidad de abonar completamente los salarios.

En Santa Fe, los representantes de General Motors y de Smata acordaron proseguir hoy las negociaciones, en busca de una solución definitiva. El encuentro de ayer tuvo la participación de la viceministra del área, Alicia Ciciliani, directivos de la empresa y los secretarios general y gremial del sindicato, Marcelo Barros y Gabriel Bianucci, respectivamente. La cartera laboral provincial dispuso una prórroga hasta el 2 de diciembre en la conciliación obligatoria que vencía ayer.

El intento de acordar consistía en trocar los despidos por suspensiones y descuentos salariales. Ciciliani dijo que se sigue “tratando de llegar a un acuerdo final” y dio detalles de la propuesta empresaria. “General Motors subió la oferta para el personal despedido con fecha diciembre de 2009, que será suspendido en el transcurso de todo este tiempo pagándole durante los dos primeros meses el ciento por ciento del sueldo y durante los otros se continuarán realizando mayores descuentos”, indicó. La funcionaria agregó que “los dirigentes sindicales siguen proponiendo que todo el personal tenga la posibilidad de rotar para las suspensiones”.

El conflicto comenzó el 17 de octubre, cuando fueron despedidos dos operarios de la planta, y luego se agravó con el despido de otros 436. La empresa adujo la crisis internacional automotriz, con el agravante de que el modelo Vitara se dejaba de fabricar en Santa Fe.

El ministro de Trabajo de la provincia, Carlos Rodríguez, consideró que es “un avance enorme” haber logrado pasar de “los 300 despidos y otros ciento y pico más que iba a haber... a no despedir a nadie y tener suspendido a parte del personal, cobrando en un principio todo el salario, que después tendrá las quitas correspondientes”. Para el funcionario, “se ha producido un cambio diametral en la situación”.