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En sus ratos libres, Villarruel se dedica a los guiones cinematográficos. Con motivo del concurso “George Mèlies”, organizado hace cuatro años por Uncipar, la Embajada de Suecia y la Cinemateca argentina, Villarruel rodó el cortometraje La salida, experimental y con elementos del expresionismo alemán, que se exhibirá hoy a las 16.45 en el Cine Atlas (Santa Fe 2015), en el Festival de Cine y Video Latinoamericano.
–¿Cómo surgió la idea de contar la soledad de los seres humanos en el mundo contemporáneo?
–La consigna era “¿A dónde vas?”. Decidí contar una historia que es el nowhere, transmitiendo la sensación de vacío que nos rodea en este mundo de hoy donde estamos hiperestimulados. Quise sacarle una fotografía al alma de la época. Me pregunté hacia dónde íbamos. Y la única salida positiva que encontré entre tanto ruido era ir hacia dentro. En una época de tanto estímulo, la solución es indagarse a uno mismo.
–¿Fue una necesidad de escapar a la histeria?
–Es una necesidad artística-espiritual, una necesidad de expresarme más allá de los productos televisivos, desde otro punto de vista. Mi formación es artística: estudié dirección y actuación, pasé por la música, el cine, la producción teatral. La vida me llevó a la TV. Mi viejo trabajaba en el noticiero del 13 y lo acompañaba los fines de semana. La tele me empezó a gustar y acá estoy: dirigiendo un canal.