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La combinación de las crisis económica y mental fue fatal. Dos meses después de haber sido dada de alta de un centro neuropsiquiátrico, una mujer hizo explotar su casa, con lo que causó su muerte y las de sus dos hijos. La explosión y el posterior incendio ocurrieron a las 5.30 de la mañana de ayer en el recoleto barrio de Palomar Finca, en el partido de Tres de Febrero. El marido de la mujer se encontraba en España buscando trabajo.
Recién comenzaba a asomar el sol cuando en la esquina de Aviador Plushow y Santos Dumont, en Barrio Jardín, se escuchó una fuerte explosión. La casa, un chalet de estilo inglés, estaba envuelta en llamas, y los vecinos desesperados. Cuando los bomberos lograron apagar el fuego, el escenario era tenebroso: los cuerpos calcinados de Cristina Carelli, de 42 años, y de sus hijos Michelle, de 12, y Axel, de 5, se encontraban arrojados en distintos sectores de la casa, después de haber sido despedidos por la onda expansiva de la explosión.
“La explosión fue provocada por Carelli, que dejó abiertas las hornallas”, aseguró a Página/12 Agustín Mozo, auxiliar letrado de la fiscalía de San Martín, quien agregó que “se está investigando si las muertes se produjeron al momento de producirse la explosión o si la madre y los chicos fallecieron asfixiados por la inhalación de monóxido de carbono”.