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Esclava para una boda

En el juicio que se sigue al supuesto pastor Jesús Olivera y su mujer, la periodista Estefanía Heit, por el secuestro y las torturas de Sonia Molina, un testigo declaró que Olivera exigía a la víctima que se casara como condición para formar parte de su congregación y que por eso él mismo estuvo a punto de contraer matrimonio con ella, envió dinero para que pagara la fiesta de bodas e, incluso, una vez le entregó dinero en mano al acusado. El jornalero Víctor Alero Sánchez relató ante el Tribunal Oral Criminal 1 de Bahía Blanca los detalles de su relación con Molina, los llamados que recibió para que le enviara dinero y cómo Olivera le exigía que contrajera matrimonio si quería ser pastora de su congregación. Alero Sánchez declaró que la mujer le contó que había ingresado en una “rama evangélica que era nueva”. En una oportunidad, dijo, cuando ella aún vivía con su hija en Río Colorado, Molina le pidió “dinero, doscientos o trescientos pesos, para ayudar a la nena” y además porque “le insistían que pasara casa por casa para recolectar”. “A veces (Molina) me contaba que se quería ir, que la iban a ayudar a estudiar, que se iba a Santa Rosa, que el señor Olivera, el pastor, la iba a ayudar, que tiene amigos abogados, le iba a dar una casa, todo, muebles, facilidades”, recordó el testigo.

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