SOCIEDAD › POR VIOLACION Y HOMICIDIO DE LA ESTUDIANTE FRANCESA

Perpetua para un vigilador

La Justicia lo encontró culpable de abuso sexual y homicidio de Perine Bermond, quien apareció asfixiada y con un cuchillo clavado en el cuello hace dos años, en un departamento de Retiro.

El ex vigilador privado Pablo Olivares fue condenado ayer a prisión perpetua, acusado por el abuso sexual y el homicidio de la estudiante francesa Perine Bermond, cometido en abril de 2004 en un departamento del barrio de Retiro. “Su hija no tuvo justicia, esto es para tapar las macanas de otros”, dijo el acusado mirando a los padres de la joven –que viajaron desde Francia para presenciar el juicio– mientras era esposado y tras escuchar el veredicto final. La pena coincidió con el pedido del fiscal y del abogado de la querella. En tanto, la defensa de Olivares adelantó que apelará la medida ante la Cámara de Casación Penal porque la condena fue “arbitraria”.

El último día del juicio comenzó alrededor de las 9. En ese momento, el acusado pudo decir sus últimas palabras antes de escuchar la sentencia. “Soy inocente y siempre quise que se supiera la verdad”, expresó. Y agregó: “Llevo casi dos años detenido por una mala investigación, creo que es injusto y me quedo tranquilo de todas las acusaciones falsas que se han hecho en mi contra”.

El veredicto fue dado a conocer pocos minutos después de las 13 por los jueces Luis García, Fernando Ramírez y Luis María Cabral, del Tribunal Oral Criminal 9. La condena que recibió el ex vigilador coincidió con el pedido de los abogados de la familia de la joven, Luis Velazco y Alfredo Battaglia, y del fiscal Horacio Michero, quienes consideraron a Olivares autor de “abuso sexual con acceso carnal en concurso real con homicidio criminis causa”, es decir que cometió el crimen para ocultar el primer hecho, que en este caso fue la violación.

Velazco, uno de los dos abogados de la familia de Perine, destacó como uno de los elementos que utilizaron para condenar a Olivares que “está comprobado que el deceso ocurrió entre las 22 y 2 de la mañana del viernes 9 de abril de 2004”, horario en el que el acusado estaba de servicio en el edificio del barrio de Retiro.

En su alegato, el fiscal Horacio Michero había afirmado que “está comprobado que Pablo Olivares atacó, golpeó, accedió vaginal y analmente y luego mató a Perine Bermond, y que si bien no se pudo determinar que el semen encontrado en la joven era el del acusado –aunque sí coincidía el tipo de sangre–, eso tampoco lo excluye”.

Otros indicios en los que se basó el tribunal para establecer la pena fueron la firma que Olivares había asentado en el registro de ingresos, donde figuraba el número de pasaporte de una persona que supuestamente había entrado al edificio, pero que luego se confirmó que era falso; y que el acusado haya señalado como posible culpable del asesinato a Sergio Domínguez, un empleado de la inmobiliaria que le había alquilado el departamento a Perine Bermond, porque, según Olivares, “esa noche estuvo en el edificio”. Tras la investigación, los pesquisas desmintieron tal visita.

Por su parte, el abogado defensor Vicente Alejandro Mainike relató a Página/12 que “está más que claro que es una sentencia totalmente arbitraria”. “El fiscal dice que se basa en indicios. ¿Cómo van a descartar la prueba científica? Es una aberración que condenen a una persona si no hay pruebas directas”, sentenció. “Se basaron en indicios y presunciones y no tuvieron en cuenta las pruebas científicas que excluían a Olivares del crimen, por eso vamos a apelar”, agregó. “Estimo que hubo presiones de algún sector, porque si no, no puedo entender cómo se llegó a una condena como ésta”, conjeturó.

Los padres de la estudiante francesa vinieron al país especialmente para seguir el desarrollo del juicio. Durante todo el proceso estuvieron presentes y ayer escucharon con atención el veredicto final, junto al cónsul General de Francia, Dominic Homa, quien los acompañó en casi todas las audiencias. Desde que comenzaron las audiencias hasta el último día, prefirieron resguardarse de la prensa y no hacer declaraciones.

Los familiares de Olivares, en tanto, se quedaron en silencio mientras estuvieron en la sala. Pero cuando salieron de la audiencia repudiaron la decisión del tribunal con algunos insultos y gritos en contra de los jueces. “Se la agarraron con mi hijo, mi hijito, mi bebé”, exclamó con lágrimas en los ojos la madre del ahora ex vigilador.

El 24 de este mes se darán a conocer los fundamentos de la condena y se podrá saber cómo votaron cada uno de los tres jueces y en qué pruebas se basaron para encontrar culpable a Olivares. Después de esa fecha, la defensa tiene siete días hábiles para apelar el fallo del tribunal.

Perine Bermond fue hallada asesinada el 12 de abril de 2004 en el departamento que alquilaba en Florida 878, en Retiro. Los pesquisas establecieron que la joven fue atacada sexualmente y luego asfixiada por una persona que entró a su casa con consentimiento, ya que la puerta no había sido violentada.


Informe: Luciano Zampa.

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Pablo Olivares era el vigilador privado del edificio de Florida 878, donde vivía la víctima.
Imagen: Télam
 
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