espectaculos

Martes, 17 de marzo de 2009

TELEVISION › ENTREVISTA CON TIMOTHY HUTTON, DE LEVERAGE

La justicia por mano propia

El actor de la nueva ficción de Space analiza el surgimiento de unos Robin Hood modernos que ofrecen justicia o venganza sin pedir nada a cambio. “A quién no le gustaría que existiera una compañía que nos ayude en algunas situaciones”, señala.

 Por Roque Casciero

Nathan Ford tiene un pasado de exitoso investigador de seguros, pero en el primer episodio de Leverage –que Space estrenará hoy a las 21–, ya está enterrado en el alcohol, sin esposa y sin hogar, enojado con aquellos para los que había trabajado: su hijo murió porque le negaron un tratamiento médico. En ese punto, se le acerca el gerente de una compañía de fabricación de aviones con una propuesta imposible de rechazar: le ofrece incorporarse a un grupo de ladrones (a todos los había capturado Ford en algún momento) para recuperar un diseño y, de paso, que los que dejaron morir al chico tengan que pagar millones por el seguro. Eficientes, los cinco Robin Hood modernos roban la información, pero descubren que fueron engañados cuando el que los contrató intenta asesinarlos. Entonces deciden volver a robarle el diseño y mandarlo a la cárcel. Y aunque a todos les gusta trabajar por separado, se dan cuenta de que como grupo son demasiado buenos. Así se conforma Leverage, una compañía a la que pueden acudir personas en busca de justicia y/o venganza, sin necesidad de entregar nada a cambio de los servicios. Sí, suena muy parecido a Los simuladores, aunque también tenga elementos de Misión imposible, Brigada A y Ocean’s eleven. “Si son similares, no es intencional –aclara el actor Timothy Hutton, que encarna a Ford–. En Inglaterra me dijeron que había un programa parecido llamado Hassle... Es lógico que la gente compare el programa con cosas que vio antes. Puede que la premisa no sea tan novedosa, pero sí es interesante: artistas del engaño que trabajan juntos para vengarse.”

Aunque aquí llega recién ahora, el equipo de Leverage ya piensa en la segunda temporada, que empezará a grabarse en abril. Claro que Hutton tiene con qué distraerse: atiende el llamado de Página/12 en Berlín, donde está filmando The ghost, la nueva película de Roman Polanski. “Es la primera vez que trabajo con él y es una gran experiencia”, asegura, aunque también dice que no encuentra muchas diferencias entre actuar para la pantalla grande o para la televisión: “Se usan los mismos equipos, se trabaja la misma cantidad de horas... No es necesario hacer ajustes. Lo importante es el material: a veces lo que me interesa hacer está en el mundo del cine y otras en el de la televisión. Disfruto de tener una experiencia plena: un buen director, un buen guión para trabajar y divertirme mientras trabajo. Eso sí, con una serie se puede desarrollar al personaje durante un período más largo. Ahí tiene una diferencia importante...”.

–Usted protagonizó Kidnapped, una serie que fue levantada al quinto capítulo. ¿Eso lo hizo pensarlo dos veces antes de volver a meterse con la televisión?

–En realidad, sólo iba a estar en Kidnapped durante un año. Si el programa seguía, iba a ser con otra historia y otros personajes, así que no era un compromiso a largo plazo. Aparte de ésa, la única serie de televisión en la que había estado antes de Leverage fue A Nero Wolf mistery, que produje, y tampoco era un compromiso a largo plazo, hacíamos un episodio por vez. Entonces, ésta es la primera vez que firmo un contrato pensando “Ok, estoy listo para hacer este programa durante seis años, si es que funciona”. No dudé en ningún momento: cuando conocí a la gente involucrada me di cuenta de que estaba muy comprometida con la serie.

–¿Qué cambió para que usted estuviera dispuesto a hacer seis temporadas de una serie?

–No es que haya cambiado algo, sino que encontré un proyecto en el que me gusta estar involucrado a largo plazo. En el pasado me ofrecieron otras series y lo pensé, pero no quise comprometerme durante tanto tiempo. Es probable que me haya equivocado, porque muchos de esos programas fueron muy exitosos. Esta vez sentí que eran el momento, el personaje y el guión adecuados.

–¿Qué lo atrajo de su personaje?

–Me pareció que el personaje estaba en un lugar interesante para empezar el programa: perdió a su hijo, a su esposa, a su casa y a su trabajo... Así que tiene que empezar de cero y construir a partir de ahí. Me gusta eso.

–¿Alguna vez fantaseó con contratar algún grupo como Leverage para vengarse de alguien?

–Allí radica la gracia del programa: todos lo hemos pensado en algún momento de nuestras vidas. ¿A quién no le gustaría que existiera una compañía como Leverage para que nos ayude en determinada situación?

–Claro, pero, ¿algún caso específico?

–No, no... Bueno, nada que pueda contarle (risas).

–En el piloto, Nate es un tipo honesto que decide involucrarse con un grupo de ladrones sólo por una vez, pero después sigue con ellos. ¿Se convertirá en un ladrón él también durante el resto de la temporada?

–En realidad, trata de distanciarse, de marcar una línea entre él y los demás: ellos son los ladrones y Nate es el que tiene el plan. Pero la cosa se complicará, entonces a él se le va a hacer cada vez más difícil no ser un ladrón.

–Usted ganó el Oscar como mejor actor secundario en 1980, por Vidas ordinarias. ¿Cómo recuerda ese momento?

–Bueno, eso fue en el comienzo de mi carrera... En el momento de los Oscar ya estaba trabajando en mi segunda película, Taps, así que viajé desde Pensilvania, donde filmábamos, y volví a la mañana siguiente de la ceremonia para seguir con mi trabajo. Obviamente, fue muy agradable estar en la entrega de los Oscar y ganarlo, aunque no pensaba que eso pudiera ser posible. No sé, fue una noche muy agradable, pero ya estaba muy concentrado en la nueva película.

–¿En algún momento sintió como una carga haber ganado el premio siendo tan joven?

–Para nada. Pasó cuando pasó, eso es todo, no es que me quedé esperando a que volviera a suceder con la siguiente película. No creo que nadie pueda esperar o planear ganar un premio. No me convertí en actor para ganar un Oscar, lo que quería era aparecer en películas, televisión y teatro. Siempre me resultó muy interesante ser parte de la narración de una historia.

Compartir: 

Twitter

Hutton y sus secuaces tienen un aire a los locales Los simuladores.
 
CULTURA Y ESPECTáCULOS
 indice

Logo de Página/12

© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados

Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.