"Sí, me gustaría ser presidente. Voy a presentarme en la Corte, pero por ahora estamos construyendo más que una candidatura, un proyecto", afirmó Francisco De Narváez de cara a las presidenciales del año 2011.

De Narváez, que además criticó a la presidenta Cristina Fernández de Kirchner por "hacer un show al comprar merluza" en puestos móviles ubicados en la Plaza de Mayo, atribuyó a la "nueva ley electoral", que establece internas partidarias, la "división de aguas" entre la fuerza que representa y la que lidera Macri.

En diálogo con la prensa rosarina en el tradicional Bar El Cairo, el diputado nacional dijo que "con Macri tenemos coincidencias y diferencias. En su momento tuvimos una sólida relación en el frente electoral que armamos, pero hoy las aguas se han dividido por el proceso de internas abiertas que se avecinan en los distintos partidos". "Hay un lógico distanciamiento" con Macri, resumió De Narváez.

Durante la charla con periodistas, el empresario nacido en Colombia calificó al ex mandatario Eduardo Duhalde como un "dirigente del pasado", realizó un guiño al senador santafesino Carlos Reutemann al considerarlo parte del "justicialismo que viene" y achacó al gobernador socialista de Santa Fe, Hermes Binner, tener "una provincia endeudada" cuando había recibido un distrito "ordenado en lo económico".

Tras remarcar que tiene "derecho" a presentarse como candidato a presidente en 2011 pese a haber nacido en otro país y ser hijo de extranjeros, en discrepancia con lo que establece la Constitución Nacional, De Narváez dijo que quienes "ponen en duda" su participación en la carrera para la primera magistratura son aquellos que "también aspiran" a suceder a la Presidenta.