Familiares, compañeros de militancia, dirigentes políticos, referentes culturales y de derechos humanos se reunieron ayer frente a los Tribunales para reclamar “la liberación de los presos políticos, perseguidos por la Justicia y el Gobierno Nacional”. El acto se realizó ayer al mediodía, cuando se cumplieron tres meses de la detención del ex secretario Legal y Técnico Carlos Zannini. Hasta Plaza Lavalle se acercaron Carlos Tomada, jefe de la bancada de Unidad Ciudadana en la Legislatura, sus compañeros de bloque Mariano Recalde, Victoria Montenegro y Leandro Santoro, además de diputados como Horacio Pietragalla, el referente de Hijos Carlos Pisoni y los hijos del ex candidato a vicepresidente, Franco y Francisco Zannini, entre otros. “El caso de Carlos es el ejemplo más claro de lo que significa la persecución política. Quieren que nos acostumbremos a esto, por eso estas muestras de solidaridad tienen el sentido de impedir que se naturalice un comportamiento que se repite en todos los sectores”, aseguró Tomada en diálogo con PáginaI12. El reclamo no sólo se produjo por el caso de Zannini sino también por el resto de los detenidos como Milagro Sala y Luis D’Elía, entre otros.

“Hoy más que nunca el Chino Zannini representa todo lo que este modelo neoliberal odia y por eso está preso. Cambiemos y sus cómplices del Partido Judicial lo tienen como a un rehén útil. Lo necesitan preso para tapar el saqueo, el hambre, el desempleo y el dolor que a diario le ocasionan a nuestro pueblo”, asegura el texto difundido ayer por el grupo de Familiares y Compañerxs por la libertad del Chino Zannini. 

“No quiero vivir en un país con presos políticos, con un conjunto de jueces que se dediquen a ser el instrumento del poder para perseguir y atemorizar a quienes se oponen a un proyecto económico que vino a redistribuir la riqueza al revés”, aseguró Recalde, quien advirtió que el Gobierno presiona a los jueces a través del Consejo de la Magistratura. “A los jueces probos los persiguen y a los que están sucios los manejan directamente”, remató el ex titular de Aerolíneas Argentinas. 

“Cuando fuimos a visitarlo Zannini dijo algo que sintetiza mucho lo que está pasando. Él planteaba que su detención anterior en la dictadura era más legal que ésta que está padeciendo y tiene que ver con un país que lamentablemente retrocedió de una forma muy terrible. En la época de la dictadura estaba prohibido militar y él hacía algo que estaba prohibido. Hoy está preso y no está mencionado en ninguna causa”, recordó Montenegro. 

Pisoni, de Hijos, señaló que para el organismo de derechos humanos el caso de Zannini es especial, ya que, igual que sus padres, estuvo preso durante la dictadura.