Lo primero que viste al nacer

Mi madre y sus hermosas tetas. Mi mamá para mí era Sofía Loren, y me acuerdo eso, de sus hermosos senos y su dulzura de piel. Era una morocha salteña, nacional, pero popular no era. Tenía mucho canto, cantaba todo el tiempo.

Lo último que te gustaría ver

Encontrarme rodeado de mis sobrinas y mis sobrinos nietos ya grandes, con sus hijos inclusive, mis sobrinos bisnietos. Y con la mirada de un amigo que quiero mucho, que amo y que espero que esté en ese momento.

Diferencias entre Macri y un gato

Hay muchas. Los gatos son inteligentes, saben lamerse, son higiénicos, son cariñosos, son afectuosos. Te acompañan muchos años de tu vida, no te engañan. Son hermosos, tienen una mirada penetrante, trabajan con tu energía y si te sentís mal ellos te arropan, te contienen. Los gatos son el elixir de la naturaleza. A Macri no lo vincularía con ningún animal, porque sería ofender a la naturaleza en sí misma. Lo vincularía con maderas, con pedazos de maderas, pero ni siquiera con maderas nobles, como el quebracho o el nogal, sino con una madera de percha mal construida en estado de descomposición. 

Tu propia versión de las siglas lgbttiq

Yo cuando tengo que nombrarlas digo lglgttttt y el abecedario, porque me olvido de qué significa cada una. Licenciado, granos, barcos, tibios, transhumantes, imanes, quimera.

Balance de estos 30 años

Son muy visibles. Cuando empecé en el año 88 estaba la crisis del gobierno de Alfonsín y también la inflación que nos afectaba a todos, pero yo era feliz, ¡porque tenía 30 años menos! Y 30 años después la inflación sigue estando y la democracia peligra mucho. Una palabra para calificar estas tres décadas de impro sería Vesubio, como el volcán. Estoy en erupción todo el tiempo, es lo que me mantiene activo, y a través de la impro puedo seguir democratizando el escenario. A la impro la usé siempre de catarsis, de juego lúdico donde podíamos neutralizar lo que sucedía. En aquella época podía hablar mal de Menem en el escenario y la gente estallaba a carcajada limpia, pero hoy no puedo hacer eso. Si hablo mal de Macri alguien se va a ofender, me van a contestar, habría una agresión del otro lado, dicha ahí mismo o escrita luego. Te quieren cortar la libertad, y eso es la democracia para ellos.

Mosquito hace 30 años

Mi cuerpo estaba a disposición de los demás, me angustiaba menos, era más frívolo. Alquilaba una casa en Caballito y no me alcanzaba para el alquiler y entonces subalquilaba los cuartos, y la dueña se enteró y se enojó, pero yo siempre tuve la cualidad de caerle bien a la gente y le dije que si no era así no la podía seguir alquilando, y me dijo que tenía razón. Ella era muy copada, yo creo que era lesbiana, porque convivía con una señora que era como una especie de ama de llaves/amiga/hermana con cara de india de Tucumán que iba con ella a todos lados en todos los instantes. Eran como María Elena Walsh y su pareja.

Lo que sigue igual en estos años

Mirtha Legrand almorzando. Me parece espantoso que se siga hablando de la misma gente: Tinelli, Susana Giménez y Mirtha Legrand. A Moria la exceptúo, se merece que se siga hablando de ella. Moria se lubricó, hizo muchas cosas, se distinguió por eso, tuvo su hija y creció, se aggiornó y puso el cuerpo. Me parece muy pobre nuestro ambiente artístico en ese sentido.

Lo que por suerte cambió

Hoy la palabra “cambiar” significa un insulto, así que es una palabra peligrosa. Antes hubo mejores vínculos con los derechos que hemos conquistado, en nuestro colectivo por ejemplo. Hubo un gobierno de verdad democrático, que fue el de Néstor y Cristina, y ese fue un verdadero cambio. Decir “guau, me están sucediendo las cosas que yo quería que me sucedieran”, y cómo se abrió el camino, se ensanchó, cómo pude gozar de mi identidad y expresarme con total ahínco y ganas y ver cómo otras personas progresaban y podían vivir de lo que hacían. Eso fue lúdico, fue real, fue concreto dentro de esta selva, y fue hermoso. Y yo tenía miedo porque sabía que eso era una isla rodeada de una tormenta que en cualquier momento estallaba.

Lo que no va a cambiar aunque quisieras

El que habla de política y se da cuenta de lo que está pasando ahora pero te dice “mirá, yo no voy a votar a la yegua o al peronismo”. Entonces le digo que vote a la izquierda y me dice “no, tampoco, son todos inútiles”. Y al final, diciendo que está cansado de lo bipolar, cuando le preguntás a quién va a votar te dice que no sabe pero vota a este gobierno. Esa persona está atravesada por la derecha y no va a cambiar, no tiene cura, lamentablemente. Y joden muchísimo. Son seres trágicos, seres con destinos logrados para sí: sufrir toda la vida. Los educaron para eso y no permiten que otros quieran liberarse. Son callos.

¿Para qué sirve un mosquito?

Sirve para amarlo, para cuidarlo, para gozarlo en el buen sentido, para tenerlo al lado como un confidente, para nunca echarle Raid. Sirve para divertirse.

Feminismo

Me encanta el feminismo, y me encanta este momento, que todavía no llegó al extremo. Me parece coherente, necesario, me parece revolucionario, y ojalá que se extreme más y que decante, que puedan hacer escuela con el propio género y le enseñen a las propias minas, que les digan basta locas, basta de criar machos. Que agarren a la mina esa que va con el bebito por todas partes, eso me parece monstruoso. Pero ojo, yo amo a los monstruos, amo a Frankenstein, a Drácula. Estos son heces que destruyen, y es lo que está germinando. Por eso me siento feminista. Tengo muchos amigos varones machistas que han cambiado mucho. Y yo he bajado línea en el colchón. Basta, el placer está en todas partes. Liberate, sacate ese mal de la cabeza.

Machismo

Tiene fecha de vencimiento. Esto tiene que evolucionar hacia un terreno más lógico, más diverso. Ahora hay un montón de histéricos e histéricas que se enojan porque hablamos con la “e”, les molesta que yo diga “chiques”, y eso que son gente “progre”. ¡Dejen de joder, loco, diviértanse! Yo lo aprendí ahora en el Festival del Bolsón. Lo aprendí en dos días y está buenísimo, me divierte y es sano. Es sano sumarse a las corrientes que vienen. La vida está para divertirse también, tener conciencia de quién soy, con quién estoy y hacia dónde me dirijo.

Piropo

A mí me gusta el piropo. Para mí el piropo es cuando alguien me dice “Qué linda que sos”, eso a mí me encanta, ya sea que me lo diga una mujer o un hombre. Me encanta cuando por la calle me gritan “Mosquito te amo”, y me lo dice alguien que no me conoce personalmente, que me conoce de verme en el teatro, o chicos y chicas que pasan en bicicleta, me encanta. Me halaga. Los piropos groseros jamás me gustaron, y eso lo aprendí de mi madre. Ella tenía buen cuerpo y cuando caminaba por la calle defendía su cuerpo y su género. Se la bancó mucho.

Chongo

Es una fruta hermosa para degustar todas las veces que uno quiera. No importa que sepa hablar, pero que sepa manejarme bien en la cama. Yo soy muy manejador, muy de dar órdenes. Que haga lo que quiera con mi consentimiento, obvio. Que grite mucho, que se mueva mucho, que ponga música para hacerlo y que saque fotos. Que ponga los Rolling Stones o Erasure. También me encanta el chongo con profesión popular: el chongo cerrajero, el chongo verdulero, el chongo carnicero.

Amor imposible

Batman. Siempre imaginaba que me venía a buscar por la ventana. Y el actor que hace de Daryl en The Walking Dead, Norman Reedus. Me encanta su rostro, su pelo sobre la cara, la voz que tiene, me encanta que es parte del héroe colectivo, el típico chongo que en la evolución de la serie dejó de ser machista y defiende a su grupo a la par con la mina. A Daryl le llegué a escribir en Instagram, le dije que yo era argentina, que amaba su personaje y a él como actor, y que yo también era actriz y actor. Me puso su “me gusta” y me dijo “Thanks”. Para mí ya eso fue como una carta de amor y todo. Otro es Brad Pitt. Y después mi amigo de Chile, que no es imposible.

Putos vs Lesbianas

Esa confrontación la evado. Hago un zigzag y continúo mi camino, no entro en esa discusión porque me deprime enormemente, es una pérdida de tiempo que no me permito para mí. Les diría “¡Chiques, basta!”. A veces leo comentarios de chicas que tienen una homofobia que me lastima, y del otro lado leo comentarios de putines que no se saben ni pintar bien la boca, y lo mismo. No, chicos, no. La violencia déjenla para la derecha. Está demodé total. Ni siquiera es vintage, es demodé.

Las travestis de tu vida

Cuando yo pude abrirme, porque aprendí a hacerlo, a ese mundo travesti porque un alto porcentaje de mí se siente representado, entré en un mundo que amo. Las amo, a las que están vivas y a las que han partido. Susy Shock, Diana Sacayán, que me parece extraordinaria y todavía hablo de ella en presente, a Marlene Wayar la adoro. Diez minutos de mi vida con Marlene es todo. Cuando viajamos Susy, Marlene y yo en el avión las azafatas nos sacaban fotos, se sacaban fotos con nosotras. Todo el mundo no podía dejar de mirarnos y me parecía fabulosa esa atracción que ejercíamos las tres. Caminar con ellas es un fuego. Y los que no nos querían no nos miraban y estaban aprendiendo igual, a mirarnos. Nada mejor que las travestis para aprender en la vida. Las travestis somos animales mitológicos y gozamos de eso, somos música, música que todavía sigue componiéndose.

Ser hombre hoy

Si sos macrista, sos un pobre tipo, no te queda otra que seguir lamentándote y seguir engañado. Si estás por fuera de ese marco político sos un hombre con posibilidades de mejorar todo el tiempo. Si sos un peronista con peronómetro activo todo el tiempo, sos un bifurcado de la inteligencia y también tenés tus límites. Si sos un tipo que se escapa de todos esos elementos que siempre nos metieron, entonces tenés salvación y hay posibilidades de un mundo totalmente distinto a este.

República Argentina

Es una extensión de un pene que no se erecta nunca. Sigue siendo “interior” cuando son provincias. Es Bartolomé Mitre unitario todavía. Es eso. Una pija que no se para nunca.

Impro

Es un largo cielo que jamás tiene techo, donde en cada nube hay un ser humano que sabe escuchar, sabe decir sí y sabe jugar con el otro. Pasé de ser un embrión a ser bebé, niño, adolescente y adulto con la improvisación. Va mejorando día a día, se está poniendo cada vez más hermoso.

La fiesta de los 30

Ya no puedo dormir. Va a haber mucha gente, muchos improvisadores y un ejército de personajes. El viernes va a ser un encuentro de seres humanos militantes con artistas militantes, cada uno en lo suyo, con sus propios pensamientos. El humor militante me encanta. Y también muchos famosos en pantalla que van a dar pautas de improvisación y por supuesto el público participando. Vamos a hablar de lo que está pasando, de lo pelotudos que somos, de lo pelotudes que somes.l

 

Única función de Salpicón de Mosquito: viernes 13 de abril a las 22 en ND Teatro, Paraguay 918.