Margarita Toro, señalada como líder de un clan delictivo en Tucumán, denunció haber sido secuestrada, acusó a integrantes de otras dos bandas locales de haber cometido el hecho y aseguró que su familia fue obligada a pagar 500.000 pesos para que la liberen, informaron voceros judiciales. Toro está sindicada por la Justicia como una de las cabecillas del Clan Toro, que domina las calles de Villa 9 de Julio, en la capital tucumana. Según la denuncia que investiga la Justicia federal, la víctima se encontraba en el barrio 130 Viviendas, ubicado en ese sector de la ciudad, cuando fue abordada por un grupo de jóvenes que se desplazaban en una camioneta.