Las comunicaciones informales de despidos en el Senasa se oficializaron ayer con la llegada de los primeros telegramas. En ese organismo se confirmó el recorte de 213 trabajadores, que se suman a los 330 despedidos de la administración nacional del Ministerio de Agroindustria. La poda en el Senasa fue en su mayoría -un 65 por ciento según informaron los gremios- en tareas administrativas, mientras que el resto corresponde a funciones técnico-operativas. Como sucedió en otras dependencias bajo la órbita de Luis Etchevehere, el recorte se concentró en contratos bajo ley marco y no sobre personal de planta permanente. Los sindicatos advierten que el INTA podría ser el próximo afectado.