Desde hoy rigen nuevos aumentos en las tarifas del servicio de agua y en el pasaje de subte, que se suman a los incrementos que ya tuvieron lugar desde principio de año en gas, luz, peajes, combustibles y transporte y a los que vendrán el mes próximo con prepagas. En algunos casos ya van por el segundo “reacomodamiento” de precios en el año, como combustible, transporte y prepagas, y en otros habrá otro ajuste a mitad de año. Bajo este cronograma de aumentos constantes, que fogonea los precios internos haciendo cada vez más difícil domar la inflación, mayo se estrena con un incremento del 46 por ciento para los usuarios del subterráneo, cuyo boleto pasará a costar 11 pesos. Esta alza es sólo un primer escalón que se completará en junio cuando trepe a 12,50 pesos, acumulando una suba de 66,7 por ciento en dos meses. Por su parte, la tarifa de agua aumentará un 26 por ciento en promedio.

Los tarifazos, que se suceden mes a mes, se están convirtiendo, junto a la devaluación de la moneda, en un piso que hará imposible cumplir con la pauta inflacionaria anunciada por el Gobierno del 15 por ciento. Como casi todos los meses, mayo comienza con nuevos ajustes para el bolsillo de los usuarios. 

El subte costará desde hoy 11 pesos y el mes próximo se ubicará en 12,50 pesos. La concesionaria Metrovías solicita llevar el ticket de viaje a los 18 pesos de tarifa técnica este año, mientras que el ente regulador Sbase planteó que la nueva tarifa responde sólo a los aumentos de los costos operativos del servicio de 2017, y no anticipa los incrementos y las negociaciones paritarias pendientes este año. La tarifa social subirá primero de 4 a 6 pesos y en junio llegará a 7, mientras que el premetro tendrá un único aumento de 2,5 a 4 pesos. El último aumento había sido el 31 de octubre de 2016, cuando la tarifa plena para el usuario trepó de 4,50 a 7,50 pesos, tomando como referencia una tarifa técnica, sin subsidio, fijada en 15,80 pesos. 

Al servicio de agua se le aplicará una quita del subsidio a lo largo del año al 30 por ciento de los usuarios residenciales, lo cual terminará encareciendo su tarifa en hasta 68 por ciento. La facturación promedio de Agua y Saneamientos Argentinos (AySA) pasará de 330 a 416 pesos por los dos servicios, agua y cloaca. Cerca de 3,5 millones de usuarios deberán afrontar el ajuste del 26 por ciento en el servicio, mientras que de ese número total, 1,1 millón de la categoría residencial recibirá una suba mayor, puesto que estará afectado por la quita de 6,25 por ciento de subsidios en cada bimestre. El año pasado el servicio tuvo un alza de 23 por ciento promedio.

El mes próximo, además del segundo ajuste del subte, el Gobierno autorizó a las empresas de medicina prepaga a realizar un aumento de la cuota del 7,5 por ciento, como resultado del análisis de la estructura de costos de estas compañías. El año pasado se había autorizado un incremento que rigió desde febrero último para las prepagas del 4 por ciento. El mes pasado, el boleto de colectivo aumentó 11,7 por ciento, de 8,50 a 9,50 pesos, y en marzo había trepado otros 50 por ciento, desde los 6,50 que valía en enero último. En junio, el boleto mínimo llegará a los 10 pesos. En abril subieron, además, los pases para las autopistas porteñas administradas por AUSA, con un alza del 13,4 por ciento. En combustibles, donde se liberalizaron los precios, las naftas y el gasoil se incrementaron el mes pasado entre un 3 y 6 por ciento, y en el acumulado de los últimos seis meses asciende a un 30 por ciento.

En abril también comenzó a regir el aumento del gas, que se ajustó en un 32 por ciento promedio, con máximos de hasta el 40 por ciento. Por su parte, la luz aumentó 52 por ciento en marzo y se espera un nuevo tarifazo a partir de agosto.