Independiente derrotó anoche 2-1 a Corinthians en San Pablo por la cuarta fecha del Grupo G de la Copa Libertadores y con seis puntos trepó de la cuarta a la segunda posición en la tabla, detrás de los brasileños que suman 7, y delante de Deportivo Lara de Venezuela, con 6 pero menor diferencia de gol (-4) y de Millonarios, de Colombia, próximo rival del Rojo, que cierra con 4.

Casi sin margen para el error pero con el ánimo en alza llegó el Rojo al partido en el Arena do Corinthians. Y menos de dos minutos tardó en ponerse en ventaja, con un gol de Martín Benítez, tras un centro de Meza y un remate de Romero en el que el arquero Cássio dio rebote.

Con esa impronta ofensiva, antes de los seis minutos el equipo de Ariel Holan sumó otra dos chances claras de gol: un remate de Meza al cuerpo del arquero y una falla defensiva del Timao que casi termina en gol.

Independiente se mostraba decidido, presionaba la salida y lo obligaba a retroceder. Cuando Corinthians comenzaba a acomodarse en la cancha, Meza ejecutó un tiro de esquina cerrado que se desvió en Angel Romero y terminó en gol en contra para el 2-0, a los 24 minutos. 

Suelto y cada vez más confiado, el Rojo tuvo chances como para estirar más su ventaja, pero Corinthians lo despertó de golpe cuando tras un pase filtrado de Romero, a los 31, Jádson descontó con una definición precisa. 

Para la segunda parte, Corinthians logró controlar la pelota ante un Independiente que si bien llegaba al arco rival ya lo hacia con la misma claridad que en el comienzo. Por el contrario, Corinthians se acercaba a la igualdad. De hecho estuvo cerca con un remate de Jádson, a los 78, luego de una buena jugada del ingresado Pedrinho. 

Se dio cuenta rápido de lo que pasaba Holan, que comenzó a mover las piezas y a rotar a los jugadores que veía más cansados. Así fue que mandó a la cancha a Gaibor (por Diego Rodríguez) con la orden precisa de tratar de tener un poco la pelota para no regalársela en los últimos minutos al rival. A sólo dos minutos de ingresar, Sheik vio la roja por una violenta falta sobre Sánchez Miño y eso le facilitó un poco las cosas al Rojo, que pudo cerrar el trámite y llevarse tres puntos muy importantes.