“Qué increíble lo que hacen. A mi hija le volvió la alegría.En mi época, si no tenías plata, te morías”(Juana, 45 años, mamá de Esmeralda, a las Socorristas en Red)

“Ya logramos la construcción de una sensibilidad social altamente legalizadora y despenalizadora que es imparable y que se muestra en la marea verde en expresiones públicas y en otras domésticas e íntimas como las conversaciones familiares los domingos -destaca Ruth Zurbriggen, activista feminista, integrante de Socorristas en Red y de la Campaña por el Aborto Legal, Seguro y Gratuito-. Se está discutiendo de aborto y eso ya es muy importante. Por supuesto estamos trabajando con fuerza para que se apruebe la ley con el proyecto de la Campaña por el Aborto Legal, Seguro y Gratuito que estamos impulsando y tenemos condiciones para que se apruebe en Diputados con mucho trabajo para que eso ocurra. Esperemos que los diputados y diputadas esté a la altura de las circunstancias y el Estado deje de abandonar a las mujeres que abortan”.  Ella prevé una gran marcha nacional para el 4 de junio, convocada por Ni Una Menos y para el 13 de junio en sintonía con la discusión sobre aborto legal, seguro y gratuito en el Congreso de la Nación. Poner el cuerpo puso más cuerpos en la calle en la trinchera en donde la política siente el brillo de la marea verde como un reflector al que no le puede dar la espalda. “Las Socorristas ayudamos a poner la palabra aborto en voz alta y ha colaborado para la desestigmatización, la desculpabilización y mostrar que puede ser una práctica segura. También ha fortalecido a profesionales de los sectores de la salud que hacen abortos seguros con quienes articulamos en distintas redes y todo ese quehacer cotidiano”, valoriza Zurbriggen. Si el aborto pasa la prueba del 13 de junio después viene la lucha más difícil: el Senado de la Nación con sectores conservadores. “Para conseguir los votos que necesitamos es muy importante la presión social de manera articulada en todos los frentes posibles”, destaca.

Las Socorristas nacen en el 2012, a partir de la iniciativa de la Colectiva Feminista La Revuelta, de Neuquén. Las Socorristas en Red -feministas que abortamos (SenR) es una articulación de colectivas de Argentina, da información y acompañamiento a mujeres y a otras personas gestantes en sus decisiones de abortar, tanto personalmente, por vía telefónica como por redes sociales. Ellas sacaron del susurro la palabra aborto y también de la soledad y las dudas la posibilidad de interrumpir un embarazo. Las socorristas reivindican un activismo del cuerpo a cuerpo y de la acción directa con líneas telefónicas (entre las cuales reconocen el hito de “Aborto: más información, menos riesgos”), folletos, páginas web, grafittis, y el seguimiento del uso de la medicación y el proceso de aborto mediante guardias telefónicas en donde la escucha y el exorcismo de culpas son parte de una tarea que teje lazos y desentierra el exilio a la soledad al que expulsa la clandestinidad del aborto. 

En cuatro años las Socorristas le dieron información sobre el uso seguro de medicamentos para abortar a 14.752 mujeres y acompañaron a 12.081 (el 81,9 por ciento) en sus procesos de aborto medicamentoso. En 405 casos -del 2014 al 2017- lograron que la Interrupción Legal del Embarazo (ILE) se lleve adelante en servicios de salud, aunque con obstáculos a pesar del Protocolo de Atención Integral para personas con derecho a la interrupción legal del embarazo, del Ministerio de Salud de la Nación, cuya última actualización fue en 2015. 

La radiografía de las mujeres ayudadas en su decisión de abortar por las Socorristas muestra que tienen, en un 72,9 por ciento de los casos, de 20 a 34 años. Solo el 15,4 por ciento tiene menos de 20 años y el 11,7 por ciento más de 35 años. “La gran proporción de las mujeres que abortan con medicación y son acompañadas por socorristas está comprendida en edades en que –socialmente– se supone que una mujer “está preparada” para ser madre, contribuyendo a desmitificar el sentido común tan extendido que afirma que “las que abortan son las adolescentes”. Asimismo, los datos también permiten dimensionar la problemática del embarazo en la adolescencia, ya que el 15,4 por ciento de las entrevistadas tenían hasta 19 años”, enfatiza el informe. Otro mito que queda desterrado es que hay una grieta entre quienes son religiosas y quienes no: el 58, 3 por ciento de quienes buscan ayuda para abortar son creyentes, en su mayoría de iglesias católicas y evangélicas. 

Las condiciones económicas de las mujeres pesan en la sensación de estar acorraladas: el 18,9 por ciento estaba desocupada y el 23,7 por ciento inactivas (no tenían trabajo, ni lo buscaban) y el 57,7 por ciento sí estaba ocupada. El 55, 8 por ciento de las mujeres se realizan un aborto con la ayuda de Socorristas tiene un ingreso inferior al estipulado por el Salario Mínimo Vital y Móvil (fijado en 8860 pesos en julio del 2017) y solo el 32,6 por ciento intenta arañar una cifra que trepe los diez mil pesos. De las  5871 mujeres socorridas solo una no había ingresado al sistema educativo y 1112 mujeres (el 18 por ciento) no terminaron la escuela media. Otra falsa pica es la simulación que se trata de una pulseada entre madres y no madres. En realidad, de 3.357 de las mujeres entrevistadas por Socorristas (más de la mitad) ya eran madres al momento de buscar información para abortar. 

Más información: www.socorristasenred.org