La diputada de Cambiemos Aída Ayala, procesada y con pedido de desafuero, fue sometida ayer a una endoscopía y le diagnosticaron una “gastritis crónica reagudizada”. La legisladora fue internada durante la madrugada del lunes en el Sanatorio Güemes de la ciudad de Resistencia tras sufrir fuertes dolores abdominales. Allí, la ex intendenta de Resistencia fue sometida a “una endoscopia digestiva alta” y se le diagnosticó una “gastritis crónica reagudizada con patología respiratoria asociada”. El ingreso de Ayala al centro de salud se produjo poco antes de conocerse la decisión judicial de la jueza federal Zunilda Niremperger, de procesar con prisión preventiva a la legisladora en el marco de la causa que la investiga por lavado de dinero. Su detención, sin embargo, no se podrá hacer efectiva hasta tanto no sea desaforada por la Cámara de Diputados. Además de dictar su procesamiento, Niremperger embargó a Ayala por 200 millones de pesos y le dictó la inhibición general de sus bienes. La ex intendenta de Resistencia y candidata de Cambiemos a gobernadora de Chaco, está acusada de ser la “jefa de una banda” destinada a beneficiarse a través del pago de sobreprecios a proveedores de servicios públicos mientras condujo el gobierno de la capital chaqueña. Los cargos que le imputa Niremperger son presunto “lavado de activos, agravado por habitualidad, por ser miembro de una banda y funcionario público”, en calidad de autora; en concurso real con los delitos precedentes de asociación ilícita, negociaciones incompatibles con la función pública, enriquecimiento ilícito, fraude en perjuicio de la administración pública e incumplimiento de deberes de funcionario público.