Mientras la familia de la joven que murió en la madrugada del domingo en el Hospital de Emergencias Clemente Alvarez manifestó que la chica, de 22 años, estaba contenta con su embarazo (de 19 semanas), ayer se analizó el fallecimiento en la Secretaría de Salud Pública municipal, con todos los registros de su paso como usuaria del sistema de salud municipal. "Para saber bien qué es lo que pasó, tenemos que esperar que estén los análisis definitivos de los cultivos que se tomaron en la maternidad Martin, donde ingresó la chica, y de los que se tomaron en el Heca en el acto quirúrgico, y se va a ver bien claro en la autopsia", expresó Daniel Teppaz, director de Salud Sexual de la Municipalidad. Es decir que todavía no se puede hablar de aborto espontáneo o provocado. Mientras tanto, la fiscal Valeria Piazza Iglesias escuchó ayer a los familiares, que podrán poner un perito de parte. Una vez que eso esté resuelto, se hará la autopsia en el Instituto Médico Legal. Se estima que puede ser durante esta semana.
La joven vivía en Empalme Graneros. Llegó el sábado a la tarde a la Maternidad Martin, donde --por la gravedad del cuadro-- la derivaron al Hospital de Emergencias Clemente Alvarez. Allí realizaron distintos esfuerzos para salvarle la vida, pero murió a las 4 de la mañana del domingo. Cuando la joven fue el viernes a controlar el embarazo, no tenía fiebre, ni otros síntomas de infección que pudieran dar el alerta en el centro de salud.
La mujer concurría a un centro de salud municipal, donde se garantiza la Interrupción Legal del Embarazo por causales, tal como está previsto en el protocolo elaborado por el Ministerio de Salud de la Nación en 2016. Allí se establece --de acuerdo a la interpretación que hizo en 2012 la Corte Suprema de Justicia de la Nación en el fallo FAL-- que no son objeto judiciables los abortos realizados en caso de violación, o en caso de riesgo para la salud o la vida de la mujer. La salud es entendida, como lo hace la Organización Mundial de la Salud, como un estado de bienestar físico, psíquico y social. En Rosario, desde 2012 no se producen muertes por abortos debido a la aplicación de este protocolo, combinada con la provisión de anticonceptivos que se realiza en el sistema de salud de la ciudad desde 1997, a partir de una ordenanza pionera en materia de salud reproductiva.
"Hay diagnósticos diferenciales en los que se barajan varios focos, no se puede descartar que haya sido un aborto provocado, pero llama la atención por todo el contexto --se explayó Teppaz--. Una vez que esté todo aislado y se conozcan los gérmenes involucrados y fundamentalmente que tengamos el resultado de la autopsia, vamos a tener una idea clara. Si fue un aborto provocado, en la autopsia se van a dar cuenta. Por el momento no podemos descartar absolutamente nada. En el caso de que fuera un aborto provocado nos llamaría poderosamente la atención, porque no cierra el contexto, no solamente los signos y síntomas de lo que le pasó".
La familia concurrió ayer a Fiscalía, donde la fiscal los escuchó. La joven estaba en pareja, tenía dos niños pequeños. Según contó la familia, no tenía conflictos con su embarazo.
En la Municipalidad, una vez que se tenga un diagnóstico certero, se analizará por qué se llegó a esa situación, como lo hacen cada vez. "Lo que nosotros no podemos olvidar es que esta muerte podría haber sido evitada, más allá del diagnóstico final. Uno hace el análisis para ver en qué punto hay un lugar, una zona, un punto débil en los procesos de atención. Revisamos las prácticas clínicas", expresó Teppaz.