Con tres victorias en tres partidos, Croacia se aseguró el primer lugar del Grupo D tras vencer 2-1 a Islandia en Rostov del Don. Por primera vez en su historia, los balcánicos ganaron su tercer partido en una Copa del Mundo, algo que fue muy bien recibido por la Selección que dirige Jorge Sampaoli, ya que el resultado dejó fuera de la pelea a los islandeses para pasar de fase. Los goles, todos en el complemento, fueron anotados por Milan Badelj e Ivan Perisic para los croatas, mientras que los conducidos por el odontólogo Heimir Hallgrímsson llegaron al empate parcial con un penal anotado por Gylfi Sigurdsson, que aun así se despidieron de Rusia. En octavos, el equipo de Zlatko Dalic se medirá el domingo en Nizhni Nóvgorod ante Dinamarca, segundo del Grupo B.

Si Islandia ganaba el tercer partido de la primera fase, podía meter apuros a Messi y Cía, sobre todo si la Selección no vencía a Nigeria. Así que, de entrada, el seleccionado vikingo no dio nada por descartado, máxime cuando daba cuenta de que Croacia se presentaría a jugar con nueve suplentes respecto de la formación que había vencido 3-0 a la Argentina el jueves pasado. Soñar no sólo no costaba nada: había que ganar.

Y si bien fue Croacia la que tuvo la iniciativa y el control del balón, Islandia estuvo más cerca de anotar. De hecho, el barbado Gunnarsson tuvo la mejor chance con un gran remate de afuera del área, pero la tremenda estirada del arquero Kalinic lo impidió. Así culminaba una primera etapa poca atractiva, que daría lugar a unos segundos 45 minutos con mucho más vértigo y emociones.

El que golpeó primero fue Croacia. El mediocampista Badelj –de gran rendimiento y elegido luego mejor jugador del partido– ingresó al área rival libre de marca y desde el punto de penal empalmó de volea un rebote para mandarla al fondo de la red.

En desventaja, los islandeses tenían que volver a remarla. Y no demoraron en su intento, ya que apenas tres minutos después Ingason reventó el balón en el poste. Hasta que Lovren cometió una falta dentro del área sobre Sigurdsson, que el mismo mediocampista ofensivo cambió por gol. 

Faltaba un cuarto de hora e Islandia ahora se atrevía a ir por todo. De hecho, Bjorn Sigurdarson, del FC Rostov, entró por Ragnar Sigurdsson, su compañero en el conjunto ruso: un delantero en lugar de un defensor central. El conjunto nórdico quería dar el golpe y se plantaba con un 3-5-2. “Áfram Ísland” (“Vamos Islandia”) se escuchaba desde las gradas. 

El encuentro se moría. Y el bombazo de Perisic que se metió en el ángulo, inatajable para Halldorsson, además del golazo de Rojo contra Nigeria en San Petersburgo, terminaban con honor la primera participación mundialista de Islandia. Así, la prolija Croacia avanza con registro perfecto a octavos y quiere más.