El Senado convirtió en juez de la Cámara Federal de Casación Penal a Carlos Mahiques, quien nunca concursó para ese cargo. Con 54 votos a favor, 11 en contra y una abstención, el oficialismo aprobó su traslado desde la Cámara de Casación ordinaria, a la que está en Comodoro Py, que tiene una competencia muy diferente, ya que analiza delitos federales (corrupción, narcotráfico, trata, lesa humanidad, entre otros). El mecanismo de “traslado” es un artilugio al que ha echado mano el gobierno de Cambiemos para designar a los jueces o juezas que le gustan o le inspiran confianza en lugares estratégicos. Casación Federal lo es, ya que se trata del máximo tribunal penal del país. Mahiques había sido antes ministro de Justicia del gobierno de María Eugenia Vidal. Su salto lo promovió el oficialismo en el Consejo de la Magistratura, donde uno de sus hijos es representante del Poder Ejecutivo. Finalmente su nombre fue enviado al Senado.  

El proceso de traslado de Mahiques estuvo atravesado por una gran discusión sobre este tipo de designaciones, que incluso llegó a la Corte Suprema cuando el Gobierno quiso crear un tribunal oral federal mudando a sus jueces favoritos desde un tribunal oral común, y lo hizo de manera directa, por la simple aprobación con mayoría simple del Consejo de la Magistratura. Sería el Tribunal Oral Federal 9, y era cantado que recibiría los principales juicios contra Cristina Fernández de Kirchner. Los Supremos al final no lo quisieron habilitarlo y anularon las designaciones. Plantearon que los traslados de un cargo de juez nacional a otro nacional, o de federal a otro federal, se pueden hacer con la sola validación del Consejo y un decreto presidencial. Pero si el pasaje es de juez nacional a un cargo federal, se debe cumplir el procedimiento del artículo 99 de la Constitución. Sería el caso de Mahiques. Por alguna oportuna razón, el Ejecutivo y el Senado evidentemente interpretan que es suficiente el acuerdo del Senado. Los 11 votos en contra fueron 8 del kirchnerismo, dos de los senadores por San Luis y el Magdalena Odarda. Como la norma constitucional habla de concurso es posible que este decisión del Senado se siga discutiendo en tribunales.

Ya hubo planteos en el fuero contencioso por el nombramiento de Mahiques que aún están en trámite. También hubo una causa penal, que se inició con una denuncia del abogado Pablo Llonto, que apuntó al presidente Mauricio Macri, al ministro de Justicia Germán Garavano y al propio Mahiques, por haber promovido su designación a través de maniobras que podrían ser delictivas. El juez federal Sebastián Ramos la cerró, la fiscal Paloma Ochoa apeló, pero el fiscal de Cámara Germán Moldes, desistió de insistir con la investigación, gracias a lo cual en mayo último quedó cerrada.

Otros jueces nombrados con traslados son Leopoldo Bruglia, que pasó de un cargo federal a otro federal (de un tribunal oral a la Cámara Federal) y Guillermo Yacobucci (de un tribunal oral ordinario a un tribunal oral federal).