El gobierno de Santa Fe declaró el estado de emergencia a raíz de la “complicada” situación provocada por las inundaciones en varias localidades provinciales, donde más de 500 personas fueron evacuadas, hubo anegamiento de viviendas y campos, y se produjeron cortes de rutas. El gobernador, Miguel Lifschitz, confirmó que los cascos urbanos más anegados son los de Rafaela, Ramona “con prácticamente la totalidad de la planta” inundada, Alvarez, María Teresa, Fighiera, Arroyo Seco y Villa Amelia, una localidad de unos 2000 habitantes que está “totalmente bajo agua”. Varios departamentos permanecen en alerta a raíz del pronóstico de lluvias fuertes hasta al menos el viernes. El ministro de Desarrollo Social de Santa Fe, Jorge Álvarez, informó que el temporal de lluvia intensa con ráfagas de viento que superaron los 80 kilómetros por hora de ayer a la madrugada agravó la situación en varias localidades. “En toda la provincia suman más de 500 las personas evacuadas y autoevacuadas de sus hogares”, precisó, y agregó que son extensas las hectáreas anegadas, hay rutas cortadas y hubo caída de árboles y postes del tendido eléctrico que dejaron sin luz a muchas localidades.