Las cuatro entidades que conforman la mesa de enlace agropecuaria se reunieron ayer con el presidente, Mauricio Macri, en un encuentro pedido hace más de un mes, cuando el dólar estaba a 25 pesos. Tres entidades salieron conformes y celebraron la respuesta del jefe de Estado: el esquema actual de retenciones a las exportaciones no se toca, pese a la brutal suba del tipo de cambio en lo que va del año, manteniéndose entonces la rebaja de medio punto mensual hasta fines de 2019. La cuarta, en cambio, no tuvo respuesta a ninguno de sus planteos. La situación provocada por el aumento de tasas, tarifazos y suba de importaciones, que afectan la realidad diaria de pequeños productores, no tendrá modificaciones ni contemplaciones en medidas de gobierno. “Hay quienes dicen que la devaluación beneficia al sector; en el caso de los productores de Federación Agraria, esto no es necesariamente así”, señaló Omar Príncipe al término de la reunión. “No todos producimos commodities, la gran mayoría lo hacemos para el mercado interno, que está muy deprimido por la pérdida de poder adquisitivo del salario y la creciente importación”, sostuvo, diferenciándose de las muestras de satisfacción expresadas por los titulares de Sociedad Rural, Confederaciones Rurales y Coninagro. 

 Daniel Pelegrina, Dardo Chiesa y Carlos Iannizzotto, sus respectivos titulares, no ocultaban su entusiasmo al salir de la reunión. “Escuchar del propio Presidente, la voz oficial del tema de las retenciones, ratificar que no va a haber ninguna variación fue una gran noticia, porque esto nos da un gran respaldo para que el campo siga invirtiendo, trabajando, dando empleo, como lo viene haciendo”, celebró Iannizzotto, de Coninagro. “Fue una buena reunión, distendida: el Presidente ratificó el rumbo, dijo que no hay ningún cambio y el cronograma sigue tal cual está, que no es intención del Gobierno cambiar ninguna regla”, resumió por su parte Chiesa, de CRA. El trigo y el maíz, a los cuales se les eliminó las retenciones en 2016, mantendrán el mismo tratamiento, mientras que para el poroto de soja, con una retención del 26,5 por ciento en julio, sigue el cronograma de reducciones pautadas de medio punto por mes, hasta llegar al 18 por ciento en diciembre de 2019. 

 La reunión había sido solicitada  el 24 de mayo, cuando por la corrida cambiaria y el espectacular salto del dólar arreciaban las versiones de que se dejaría sin efecto la reducción de retenciones a la soja, Nicolás Dujovne daba a entender que la medida estaba a estudio y el ministro de Agroindustira, Miguel Etchevehere, aparecía debilitado en la interna del gobierno y su palabra ofrecía poco como garantía. Cuarenta días después, no sólo la corrida siguió su camino, sino que la situación económica se sumergió en una crisis y depresión que sólo el ministro de Hacienda desconoce. Federación Agraria sumó a la demanda en defensa de los agroexportadores, la preocupación por quienes producen para el mercado interno. Sólo para los primeros hubo respuesta. 

 Del encuentro también participaron el ministro Etchevehere, y su jefe de asesores, Santiago del Solar. En un momento de la reunión, tras allanarse la cuestión de las retenciones, Príncipe planteó que también existía inquietud por la situación de pequeños productores y agricultores familiares. Reclamó la reglamentación pendiente de la Ley de Agricultura Familiar y relató, en particular, la situación de los tamberos y de los productores de cerdos, que como resultado de los aumentos en los insumos (muchos de ellos dolarizados), el gasoil, las tarifas energéticas y el alto costo de financiamiento, “suman pérdidas a diario”. Afectados, además, por un mercado deprimido por la baja del consumo y la participación creciente de la importación, como en el caso de la carne de cerdo de origen estadounidense. 

 Ante cierta expresión de asombro del Presidente, tomó la palabra el jefe de asesores Del Solar, quien le explicó que “estos productores antes tenían fuertes subsidios, pero cuando dejaron de recibirlos quedó en evidencia que eran ineficientes; si no se reconvierten, no podrán seguir en actividad”. Los gestos de consentimiento y el silencio de los otros tres integrantes de la Mesa dejaron en soledad el reclamo del titular de Federación Agraria.