Tambalea el acuerdo de libre comercio entre el Mercosur y la Unión Europea (UE). Después del fracaso de las negociaciones entre ambos bloques a fin de año en Buenos Aires, las conversaciones se estancaron por la resistencia de países como Francia, Polonia o Irlanda para comenzar a abrir sus mercados agropecuarios. La existencia de cuotas restrictivas, de elevados niveles de subsidios como la Política Agrícola Común (PAC), y otras barreras para-arancelarias limitan el acceso de los productos argentinos, brasileños, uruguayos y paraguayos a la UE. La firma del acuerdo entre ambos bloques pone en riesgo 186 mil puestos de trabajo industriales. La UE es un socio comercial relevante para Argentina. Entre 2015 y 2017, el 15 por ciento de las exportaciones, fundamentalmente derivados de la soja y alimentos –productos marítimos, carne bovina, productos frutihortícolas maní y vino–, tuvieron como destino los países del bloque. El tratado que profundizará el proceso de desregulación comercial de los países sudamericanos comenzó a gestarse hace más de dos décadas.