Un nuevo atentado contra el centro cultural marplatense El Séptimo Fuego vuelve a poner en alerta a la comunidad cultural de esa ciudad, a un año del último de una serie de episodios sucedidos contra ese espacio.  En esta oportunidad, al menos tres personas registradas por una cámara rompieron los vidrios de entrada del teatro e ingresaron al lugar. Fue en la madrugada del lunes y como la alarma sonó rápido los sujetos no pudieron llevarse nada, aunque dejaron destruido el ingreso del espacio emblema de la movida cultural. Como en las anteriores oportunidades, sus referentes están convencidos de que no se trata de un hecho al azar. Y es que apenas veinticuatro horas antes se había llevado a cabo, en el mismo lugar, una concurrida presentación de la Coordinadora contra la Represión Policial e Institucional (Correpi) de Mar del Plata, lanzamiento que despertó el interés de mucho y la inquietud de otros tantos. 

“Lamentablemente tenemos que volver a vivir estos hechos vandálicos. Sucedió cuando denunciábamos el vaciamiento cultural y sucede no casualmente ahora, cuando lanzamos la regional marplatense de Correpi con la presencia de la mesa nacional y de organizaciones sociales y culturales”, contó a PáginaI12 Viviana Ruiz, actriz, directora, militante y referente de El Séptimo Fuego, espacio multipremiado y reconocido que el año pasado celebró veinte años ininterrumpidos en la actividad teatral independiente. “No vamos a parar. Lo único que sabemos hacer es denunciar las políticas de ajuste y represión que nos hace vivir este sistema, y ese es el camino que vamos a seguir”, sentenció la teatrista en diálogo con este diario. 

A mediados de julio del año pasado, en el medio de las denuncias del sector cultural a la pésima gestión cultural de Cambiemos, Ruiz había sido amenazada de muerte por teléfono. Unos días más tarde, una o más personas no identificadas rompieron la puerta de entrada. Dos meses después la cosa empeoró y directamente los agresores rompieron la reja del teatro con una barreta de hierro y burlaron las dos cerraduras que protegían a la asociación civil, con una clara intención de mostrar que las amenazas iban en serio. Pero desde entonces, y gracias al amplio apoyo de todo el sector cultural y a masivas movilizaciones en defensa del espacio, los atentados frenaron. En este tiempo, también, se produjo la ansiada renuncia de la ex secretaria cultural del partido de General Pueyrredón, Silvana Rojas, señalada por la comunidad cultural como una de las máximas responsables por el vaciamiento y el deterioro de las políticas públicas destinadas al sector. 

Sin embargo, ante este nuevo atentado, la comunidad volvió a entrar en alerta. Al cierre de esta edición, distintas organizaciones sociales y culturales se reunían en asamblea para elaborar un comunicado conjunto en repudio a los hechos. Por su parte, desde Correpi responsabilizaron por el ataque al gobierno del intendente Carlos Arroyo. “Este nuevo ataque, por el que responsabilizamos al gobierno municipal, directo ejecutor de la política de ajuste y represión del gobierno nacional, confirma la necesidad de fortalecer la lucha organizada en unidad de acción”, expresaron en un documento desde esa organización.